Saltillo: Persiste contaminación ‘muy mala’ durante las noches, cerca de zona industrial
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Las mediciones del Instituto Municipal de Planeación de Saltillo (Implan) indican que la contaminación en el norte de la capital coahuilense persiste principalmente durante las noches.
Los registros públicos disponibles en la página oficial del Instituto muestran que, en los últimos 15 días, los niveles de calidad del aire han sido calificados como “muy malos” en horario nocturno.
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La estación Bomberos Norte, ubicada sobre el bulevar Isidro López Zertuche, fue la que detectó los niveles de partículas PM 2.5 durante este periodo. Según el Índice Aire y Salud, se considera que la calidad del aire es “muy mala” cuando se registran al menos 79 microgramos por metro cúbico, situación que se ha reportado en las noches en esa zona de la ciudad.
Entre las 22:00 horas del 3 de octubre y las primeras tres horas del 4 de octubre, los niveles de contaminación alcanzaron entre 79 y 148 microgramos por metro cúbico. De las 25 horas más contaminadas de los últimos 15 días, solo tres registros ocurrieron fuera del rango de 22:00 a 05:00 horas.
Los datos de la estación Bomberos concuerdan con las quejas de vecinos de colonias como Kiosco, La Salle y Los Maestros, quienes señalan que empresas del sector, particularmente Tupy, emiten un polvo contaminante durante la noche.
En una evaluación de promedios diarios, la estación Canacintra, también cercana al corredor industrial del bulevar Isidro López Zertuche, reportó tres días con calidad del aire “mala”: el 18 y 19 de julio, y el 21 de septiembre. Sin embargo, el resto de los días no mostró una mejora significativa. De los 116 promedios diarios registrados, solo en 56, menos de la mitad, la calidad del aire fue “buena”; en 57 días, fue “aceptable”.
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¿QUÉ SE HACE ANTE UNA CALIDAD DEL AIRE “MALA” O “MUY MALA”?
El Índice también advierte que la contaminación “muy alta” aumenta la probabilidad de síntomas respiratorios en la población general. Esto puede agravar los síntomas en grupos sensibles, como niños, adultos mayores, trabajadores al aire libre y personas con enfermedades pulmonares como EPOC y asma.
Asimismo, se puede registrar un aumento en los síntomas cardiovasculares, como dolor precordial en personas con enfermedades del corazón, así como un mayor riesgo de muertes prematuras entre quienes padecen enfermedades cardiacas o pulmonares. Por tanto, se considera un riesgo “muy alto” y se recomienda evitar actividades físicas moderadas y vigorosas al aire libre.
