Sí está protegido el sarape de Saltillo contra la apropiación ilegal: Secretaría de Cultura
COMPARTIR
Zanjan la vieja controversia de si esta prenda tradicional mexicana sigue expuesta a los intereses comerciales de particulares.
Luego de los intentos de lucro de que ha sido objeto por parte de diferentes firmas comerciales, el sarape de Saltillo se encuentra bajo buen recaudo.
La tradicional prenda, considerada patrimonio de los saltillenses, cuenta desde 2016 con un registro de marca ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), hecho que ha sido suficiente para proteger a los artesanos.
TE PUEDE INTERESAR: Dejan fiestas del Santo Cristo 40 toneladas de basura en calles aledañas a la Catedral de Saltillo
Esto permite tutelar su proceso de elaboración, corroboraron la Secretaría de Cultura y Francisco Javier Reyes Luna, propietario de la escuela y antiguar fábrica de sarapes “La Favorita”.
Ambas fuentes zanjaron la vieja controversia relativa a que la pieza podría volver a ser motivo de especulación económica por particulares, sin consecuencias jurídicas para ellos.
Además de las ventajas de dicho registro, se cuenta con un importante soporte jurídico por parte de la Secretaría de Cultura federal, dijo Reyes Luna.
Si bien existe en México una amplia variedad de sarapes, el de Saltillo es único por su modo de elaboración, colores, geometría y simetría, destacaron.
En algún momento, egresados de la Facultad de Jurisprudencia de la UAdeC señalaron la urgencia de registrar una indicación geográfica para el sarape de Saltillo ante el IMPI, lo cual permitiría proteger su diseño y elaboración artesanal.
“Desde luego, sí existe la manera de proteger contra cualquier intento de apropiación de las técnicas de elaboración y diseños del sarape”, afirmó.
Sin embargo, hay quienes todavía consideran que el registro de los derechos sobre la prenda es un tema complejo, ya que no se trata de una obra de autoría individual, sino un patrimonio cultural colectivo.
Entre las firmas que han sufrido las consecuencias de haber intentado apropiarse de los derechos sobre el sarape, se encuentran: Carolina Herrera, West Gordon, Ralph Lauren, Comme des Garçons, Junya Watanabe, Zara, Anthropologie, Patowl y Shein.
Esto, gracias a que el gobierno federal intervino directamente para defender la autoría colectiva y el patrimonio cultural promovido por los artesanos.
Ahora, las firmas o personas que utilicen los diseños del sarape deberán reconocer y retribuir económicamente a las comunidades que los crearon y preservaron.
Por otra parte, la Ley Federal de Protección del Patrimonio Cultural de los Pueblos y Comunidades Indígenas y Afromexicanas, aprobada en 2021, establece sanciones para estos casos, tanto de tipo legal, como económicas y culturales.
LA IMPORTANCIA DE HABER SIDO DECLARADO PATRIMONIO CULTURAL
José Palacios Ortiz, exdirector del Instituto Municipal de Cultura de Saltillo (IMCS) recordó que, en sesión de Cabildo, el sarape fue declarado, en 2020, patrimonio cultural inmaterial de Saltillo.
Ello significa que la prenda pertenece a todos los saltillenses, “no a una sola empresa o familia”.
“Es como una marca de origen, como sucede con el tequila, con la que el mundo puede identificar a la ciudad de Saltillo”, explicó.
Palacios Ortiz consideró que esta declaratoria municipal “debe pesar” al momento de defender al sarape en casos de apropiación.
“Todo lo que se refiera a la protección del patrimonio local, tanto tangible como intangible, debe dársele la importancia debida, a fin de que no se pierda esta importante tradición que le da identidad a la capital de Coahuila”, expresó.
NO ESTÁ PROTEGIDO PLENAMENTE
“En efecto, hay un registro del sarape, pero persiste el mismo problema con el que se enfrentan, por ejemplo, los artesanos de Oaxaca, a quienes también les plagiaron sus creaciones”, expuso por su parte Jesús Gerardo Segura.
“Y, como son tantos los diseños, en ningún momento va a aparecer debidamente registrado, pues cada fabricante puede producir y registrar por separado sus propios modelos, lo que se convertiría en el cuento de nunca acabar”.
“La salvedad podría ser que, como concepto, en el que se destaquen sus características fundamentales, el sarape sí pueda ser protegido plenamente... Pero esto no deja de ser un buen reto”, comentó el promotor cultural.
Mientras tanto, existe en el IMPI un registro bajo el nombre “Sarape Fino de Saltillo”, con el que estarían protegidos los derechos de los artesanos”, apuntó.