Siguen hallazgos en ‘campos de exterminio’ en Coahuila: Grupo Vida

El colectivo de familias en búsqueda de personas desaparecidas Grupo Vida de la Laguna reveló que los hallazgos de fosas clandestinas en la entidad persisten, y que en la actualidad, se encuentran trabajando en 27 predios de forma aleatoria, mientras que las autoridades no han logrado dar la dimensión correcta a la problemática.

A más de 10 años de que el colectivo Grupo VIDA empezó a realizar búsqueda en estos predios que son considerados como “campos de exterminio”, donde el crimen organizado pudo haber inhumado a personas desaparecidas. Para Silvia Ortiz, quien encabeza este colectivo, los avances para concluir con la exploración y recuperación de restos óseos en las fosas, han sido limitados toda vez que entre más se ingresa al terreno, más indicios son encontrados.

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“Cuando pensamos que estamos avanzando, nos topamos con más”, dijo Ortiz.

En una entrevista en el Marco del Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, la fundadora de Grupo Vida dijo que predios como Patrocinio, que fue uno de los primeros puntos de inhumación clandestina que se descubrieron desde su organización, son de una alta complejidad, puesto que no existe un patrón que indique líneas para el hallazgo, toda vez que hasta ahora, han obtenido indicios de que este punto fue utilizado por más de un operador.

“Esto implica que no puedes decir: hay un patrón de búsqueda. Como podemos encontrar en el centro, podemos encontrar en la orilla. Por semana escarbamos cuatro cuadrantes (2x2 metros), porque así tenemos que hacerlo porque no podemos dejar nada. El lugar es de 67 hectáreas, imagínate”, explicó.

El problema más grande que Grupo Vida observa, es que en los últimos años, al igual que Patrocinio, se ha trabajado en otros predios de una complejidad similar, ante la falta de recursos humanos y materiales para concentrarse en un solo lugar.

Algunos de los campos de exterminio en los que han trabajado tanto en este, como en los años anteriores, son El Venado, El Volcán, La Rosita, San Antonio de Gurza, Santa Elena, San Antonio del Alto, Francisco Aguanaval, Estación Claudio, Tierra y Libertad; todos ellos ejidos de municipios de la Laguna, como son San Pedro de las Colonias, Matamoros y Torreón.

“Vamos de una a otra y no podemos terminar, y faltan lugares totalmente vírgenes que ya se localizaron, pero no hemos podido intervenir porque no acabamos. Nos faltan manos”, expresó.

La madre quien desde el 2004 busca a Fanny de Sánchez Viesca Ortiz, dice que la situación no ha sido dimensionada por las autoridades como corresponde, toda vez que se cuando se habla de “fosas clandestinas”, se toma únicamente a un predio en cuenta a pesar de que existen lugares como San Antonio del Alto, donde fueron encontradas 170 fosas clandestinas exploradas, donde se ha recuperado material biológico que puede corresponder a una o varias personas.

“No nombran a Coahuila como un lugar de fosas. La respuesta es que lo están tomando como un solo sitio. Patrocinio la toman como una sola fosa cuando son una cantidad de fosas indeterminada”, expresó.

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Aunque a lo largo de este tiempo Grupo Vida ha obtenido resultados positivos en muchos de los lugares que han ido a explorar, Silvia Ortiz resalta que los cambios abruptos que se han experimentado en las administraciones gubernamentales en departamentos científicos, policiales y forenses, también han generado otros desórdenes.

“Ahora, la Policía Federal dejó de existir y nosotros les solicitamos el retorno de los restos y no los han regresado todos, aun cuando ya su institución no existe. La FGE está trabajando otros desde su institución y otra parte la tiene la FGR, estas instituciones poco a poco han ido trasladando todos estos indicios al Centro Regional de Identificación Humana”, indicó.

Dijo, que ahora, en el CRIH se está trabajando en la identificación por predios, y ya se han logrado algunas identificaciones; por lo menos, siete, incluyendo de lugares donde las personas fueron víctimas de homicidios en condiciones donde se pretendía borrar el rastro.

Esto ahora representa otro reto: la entrega digna, y la aceptación de las familias sobre los primeros datos de lo que pudo haber ocurrido con sus familiares desaparecidos.

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“Han sabido identificar, pero eso no implica que siga lo complejo. El problema es que de tres mil restos, solo uno podría ser viable de identificación. Lo que viene después es la aceptación de las familias, que es lo que estamos trabajando ahora. Es un tema que hemos solicitado al Gobierno Estatal y Federal para que puedan tratarlo. No se puede entregar más hasta que la ciencia avance”, dijo Silvia Ortiz.