Trabajar más horas, no significa mayor productividad, dice diputado federal por Coahuila

Trabajar más horas al día no significa, en automático, un incremento en la productividad laboral; para lograr esto se requiere brindar cursos de capacitación a los trabajadores para que tengan mayores conocimientos, habilidades y destrezas en el desempeño de sus funciones laborales.

“¿En qué momento vamos a dejar de pensar que trabajando más horas significa elevar la productividad?”, cuestionó el diputado federal por Coahuila, Tereso Medina Ramírez (PRI), al señalar que el mejor capital humano que tiene el País son los trabajadores y estos demandan reducir la jornada laboral semanal de 48 a 40 horas.

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Añadió que, sin importar las centrales sindicales, en las próximas negociaciones de los auténticos contratos colectivos deberán luchar no solo por obtener salarios dignos para sus representados, sino que también deberán luchar por beneficios en la salud y calidad de vida de los trabajadores.

Señaló que, sin importar si se es empleador, trabajador o legislador, hay que pensar en el bienestar de los trabajadores y sus familias, en mejorar las condiciones de seguridad, higiene, capacitación y productividad, y para ello se requiere elevar el intelecto y la destreza de cada trabajador a través de la capacitación laboral y se debe confiar en el compromiso de cada trabajador y trabajadora.

Refirió que los trabajadores se preguntan cuándo será posible estar más tiempo con la familia, con los hijos y cómo evitar los accidentes y enfermedades laborales, incluso las muertes repentinas y en qué momento intervendrán los inspectores de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.

Se requiere, dijo, sumar voluntades para que la persona trabajadora tenga acceso a una justicia laboral, en un entorno productivo más humano, que se refleje en una mejor calidad de vida, no solo del trabajador, sino de la familia.

Al reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas, los trabajadores dispondrían de más tiempo para convivir en lo social, con lo cual serían mejores padres y madres y mejores ciudadanos.