México ‘hace el oso’ en duelo frente a EUA
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En un encuentro con agresiones físicas, verbales y gritos homofóbicos, el marcador 3-0 terminó siendo lo menos importante de la noche. El Tri aún buscará el tercer puesto
PARADISE.- La Selección Mexicana de Fútbol, tuvo que despedirse del título de campeones de la Concacaf Nations League al no poder superar a su acérrimo rival, Estados Unidos, en el duelo de Semifinal que se llevó a cabo esta noche desde Nevada; se vieron superados con un marcador 3-0, además de haber dejado una mancha de agresiones verbales y físicas dentro y fuera de la cancha.
El duelo terminó minutos antes del agregado final, debido a los gritos homofóbicos que la afición mexicana reiteró desde las gradas.
Sin embargo, aún con la derrota que se dio gracias al doblete de Christian Pulisic, el Tri tiene la oportunidad de quedarse con el tercer lugar del campeonato.
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La considerada “primera prueba de fuego” para el director técnico argentino, Diego Cocca, se vio frustrada para unos mexicanos que llegaban con dos objetivos en mente: destronar al actual campeón del torneo y acabar con su mala racha frente a ellos.
De este modo, los del “Team USA” de Anthony Hudson, están a un paso de reafirmar su condición de favoritos. Solamente les hará falta vencer a Canadá en la última instancia del certamen.
SE ACABÓ PARA MÉXICO
En punto de las 20:00 horas, el árbitro Iván Barton marcó el inicio de las Semis en el Allegiant Stadium, y, desde ese momento, EUA mostró la intensidad con la que buscaba dejar al combinado azteca atrás.
Los de las barras y las estrellas realizaron su primera llegada en el marco protegido por Guillermo Ochoa tan sólo en el minuto dos con un pase filtrado de Tim Weah.
En respuesta, Jesús Gallardo produjo el contraataque que, con un potente pase dentro del área con el que buscaba a Uriel Antuna, fue frustrado por el arquero Matt Turner.
Entre faltas y peleas por el esférico dentro del terreno de juego, al minuto diez Orbelín Pineda dejó ir la primera clara para México, cuando recibió un balón con gran oportunidad de hacer daño, pero que después regaló a la defensa rival al no levantar la cabeza y visualizar un objetivo.
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El ambiente comenzaba a calentarse, especialmente después de que los aficionados mexicanos realizaran el grito homofóbico en las gradas del recinto que fue silenciado con un mensaje en las pantallas del estadio, donde se dejaba en claro que, de reincidir, habría un castigo.
En todo este tiempo, 23’, los aztecas se habían salvado del poder de Pulisic, que, inicialmente falló un tiro con marco abierto, después de quitarse a Ochoa, al lanzarlo por encima del travesaño. Tres minutos después, consiguió una falta que cobró con un potente raso que acabó en las manos del arquero mexicano.
Fue hasta el 37 cuando el delantero finalmente pudo abrir el marcador, gracias a un error de Jorge Sánchez, quien no pudo controlar un pase retrasado de Edson Álvarez y que, en lugar de defender, se convirtió en una asistencia de gol.
Después de 45 minutos y dos adicionales, se reanudó el duelo con un gol más de Pulisic; este doblete fue fundamental para concretar el duelo.
La desesperación de México se hizo evidente a partir del minuto 52, cuando Cocca, en búsqueda de hacer que sus entrenados reaccionaran, ordenó la entrada de Ozziel Herrera y Santiago “Chaquito” Giménez, en los lugares de Jesús Gallardo y Henry Martin.
DE TODO MENOS FÚTBOL
Lamentablemente, el partido se vio manchado por actitudes antideportivas, en las manos de ambos equipos.
Primero, Israel Reyes fue amonestado por frenar a Gio Reyna, quien reaccionó sonriendo y levantando las manos hacia la afición, acción que hizo enojar al Tri; Giménez se hizo de empujones con Antonee Robinson y ambos fueron amonestados.
Y, en el 62’, César Montes recibió un golpe al disputar el balón con Folarin Balogun, lo que significó un preámbulo del rencor que minutos después el mismo “Cachorro” se cobraría al dar una patada directa a Balogun.
Esta situación desató el enojo de los jugadores de ambas escuadras. Mckennie fue a empujar a Montes y rápidamente el resto de los jugadores se acercaron, unos a intentar calmar el altercado y otros a continuarlo.
Resultado de ello, fue la playera rota de McKennie, quien también fue expulsado por burlarse de México al besar al escudo de Estados Unidos frente a la afición mexicana y de hacer la seña “2-0”.
Con minutos perdidos, finalmente se reanudó el duelo y, con los ánimos calientes, llegó el tercer gol de la noche, firmado por Ricardo Pepi.
Ya no había nada más que hacer en el estadio de Paradise aunque se agregaron 12 minutos; tiempo en el que tanto la afición como los jugadores, sólo demostraron actitudes antideportivas y molestas que tergiversaron el juego y terminaron convirtiéndolo en una humillación completa para México.
Estas actitudes, incluso, hicieron que faltando seis minutos para concluir, el árbitro central decidiera poner punto final al juego de la noche.
El Tri se disputará el domingo el tercer lugar frente a Panamá.
