Trabajo remoto, ‘lo bueno’ que dejó la pandemia del COVID-19
La posibilidad de laborar a distancia es una modalidad que ha llegado para quedarse, aunque se debe de contar con las mejores condiciones para ello, según un estudio que realiza NordLayer y el cual este año no dejó muy bien parado a México
Con el surgimiento de la pandemia de COVID-19, el trabajo remoto comenzó a tomar altos niveles en todo el mundo, al permitir a los empleados mover su ubicación de manera temporal o permanente, sin embargo, no todos los países ofrecen las condiciones óptimas para los nómadas digitales y eso se refleja en el estudio anual que realiza NordLayer.
En términos generales, el estudio arroja que los 10 mejores países para el trabajo remoto son Dinamarca, Países Bajos, Alemania, España, Suecia, Portugal, Estonia, Lituania, Irlanda y Eslovaquia.
TE PUEDE INTERESAR: Prevén boom en la demanda de espacios de oficinas con nueva NOM-037 de teletrabajo
El estudio destaca también a Uruguay (puesto 43) y Chile (50). Costa Rica recibió el puesto número 54, Argentina el 55 y México el 62.
En el caso de México, mientras que en el 2022 se ubicó en el sitio 50 de 66 países analizados, este año pasó al sitio 62 de un total de 108 países.
El Índice Mundial de Trabajo a Distancia de NordLayer es un estudio basado en cuatro aspectos relacionados con el trabajo remoto: las condiciones económicas y sociales, la estructura digital y física, los niveles de ciberseguridad, y la seguridad social.
Con respecto al nivel de seguridad digital, se analizó en cada país la solidez de la infraestructura y la respuesta a las amenazas del delito cibernético.
En relación con el atractivo socioeconómico, se analizó el costo de vida, el acceso a la atención médica, la facilidad de comunicación y las oportunidades de tiempo libre de calidad.
En materia de confort físico y digital, se evaluó la velocidad de la conexión a internet y su asequibilidad.
Finalmente, para calificar la seguridad social se tuvo en cuenta la seguridad general frente a delitos dentro del país y la equidad y acceso a los derechos humanos.
El índice de NordLayer es “una herramienta para que los profesionales digitales evalúen y comparen el atractivo de 108 países como lugares de trabajo remoto”. Para ayudar a determinar dónde viajar y trabajar utiliza “datos recopilados por científicos que utilizan solo estudios confiables y actualizados”.
NordLayer es una herramienta de ciberseguridad de Nord Security, diseñada para ayudar a las organizaciones a proteger sus redes. En otras palabras, es la solución para modernizar las redes de internet y conseguir que los recursos en línea sean más accesibles, un requisito para que el modelo home office (cada vez más popular en México) funcione de forma eficiente.
MÉXICO, A MEJORAR
Sin duda, México necesita mejorar algunos aspectos para ser una opción más cotizada dentro del trabajo a distancia, al menos tanto como Alemania o Portugal, pero va por buen camino.
Así, el estudio arrojó los resultados obtenidos por México en diferentes rubros:
La seguridad social mexicana ocupa el puesto 65.
Los niveles de inclusión del país le entregaron la posición 61.
En cuanto a la ciberseguridad, México se queda en el puesto 66.
Las infraestructuras digitales y físicas colocan a México en la posición 46.
La seguridad económica se traduce en el puesto 63.
Las medidas legales disponibles son más positivas, ya que colocan a México en el puesto 23.
El coste de vida es asequible, por eso vemos que México ocupa el puesto 38 en este aspecto.
El peor resultado mexicano lo vemos en el nivel de dominio del inglés, arrastrando el país al puesto 79 de los 108 países analizados por NordLayer.
SEGURIDAD, LA CLAVE
A título individual, los usuarios pueden aplicar sencillos consejos de ciberseguridad para proteger sus dispositivos profesionales.
“Aunque algunas de las grandes empresas tecnológicas han devuelto recientemente a sus empleados a la oficina o han introducido un modelo de trabajo híbrido, el trabajo a distancia ha llegado para quedarse. No se trata solo de una tendencia, sino de un cambio fundamental en la forma de enfocar la productividad y el equilibrio entre la vida laboral y personal. Adoptar el trabajo a distancia permite a nuestros equipos aprovechar todo su potencial, independientemente de las fronteras geográficas”, señala Donatas Tamelis, director general de NordLayer.
Para proteger la privacidad de los dispositivos que están implicados en el trabajo a distancia, en el ya popular modelo híbrido (conocido como home office en diversos países latinoamericanos), es necesario considerar algunos consejos.
Instala una VPN y actívala siempre que navegues por internet. La descarga de una VPN es un requisito imprescindible para aumentar los niveles de ciberseguridad de tus dispositivos, entre otros motivos, porque te permite encriptar el tráfico online y ponérselo más difícil a los hackers.
Mantén actualizados los sistemas operativos. Llevar al día las actualizaciones de los dispositivos puede marcar la diferencia, ya que las últimas versiones intentan acabar con los ataques de día cero y otras vulnerabilidades.
Intenta evitar las redes wifi públicas. Esta es una recomendación pensada, especialmente, para los trabajadores de la banca electrónica y otros sectores que manejan información muy sensible. Resulta tentador teletrabajar desde tu cafetería favorita, pero los ciberdelincuentes son expertos en interceptar datos en las redes wifi de libre acceso.
Activa la autenticación de dos factores. No basta con elegir solo contraseñas robustas, la tecnología ya permite añadir capas de seguridad a los inicios de sesión, frenando la entrada de las personas no autorizadas. Nos referimos a la 2FA o su versión más compleja, MFA.
LLEGÓ PARA QUEDARSE
“La tendencia es clara, desde el comienzo del COVID-19, el trabajo remoto o híbrido se ha vuelto inevitable incluso en aquellas empresas que anteriormente predicaban la importancia de las interacciones cara a cara”, dijo en un comunicado el director de Tecnología de NordLayer, Juta Gurinaviciute.
TE PUEDE INTERESAR: Home office está ‘casi muerto’ en México, apenas 17% labora desde casa
Dos estudios recientes apuntan al impacto duradero del trabajo desde casa, toda vez que cerca de un 75% del aumento en el teletrabajo observado durante el COVID-19 se mantendría.
De hecho, empresas como Airbnb (ABNB) y Twitter Inc. (TWTR) han anunciado políticas de trabajo remoto completo.
Expertos como Prithwiraj Choudhury, profesor de la Harvard Business School y experto en trabajo a distancia, señalan que dentro de una década es posible que las oficinas se utilizarán para una cosa y solo para una cosa: tiempo de calidad con los colegas de trabajo.
“Probablemente dentro de 10 años dejaremos de llamar a esto trabajo remoto. Lo llamaremos simplemente trabajo”, dice Choudhury, quien también asegura que las empresas que no se adapten corren el riesgo de una mayor deserción.
TRABAJANDO EN VACACIONES
La flexibilidad laboral llevaría a más personas a trabajar desde sitios vacacionales.
Aunque naturalmente los empleados se enfocan más en las playas y la oferta gastronómica para disfrutar después del horario de oficina al escoger una ubicación de trabajo remota, no todos esos lugares amados o deseados son la mejor opción para trabajar.
Según NordLayer, al seleccionar la ubicación de trabajo remoto se deben tener en cuenta aspectos como la seguridad, ya sea una estadía temporal o reubicación de largo plazo; la calidad del internet, ya que una “workcation” -término que usa para describir una nueva locación de empleo- es imposible sin una buena presencia en línea durante la horas de trabajo, pero también es importante que la conexión sea asequible.
En otros aspectos, también es clave el costo de vida, pues la comodidad se relaciona con infraestructura de transporte, vivienda asequible, oferta de espacios de trabajo conjunto, estabilidad de la moneda y asequibilidad para cubrir las necesidades básicas en precios locales para que sea una buena y rentable estadía.
COMENTARIOS