Curación de enfermedades y protección del mal: ¿Quién es el Niño Fidencio y qué milagros hizo?
COMPARTIR
TEMAS
Localizaciones
El Niño Fidencio curó de lepra a un presidente de México, según la leyenda. Por eso y más, creyentes conmemoran su nacimiento y muerte en octubre, haciendo mandas y oraciones
¿Has escuchado del niño mexicano que hacía milagros? Los próximos días de octubre fieles creyentes conmemorarán el nacimiento y la muerte de José Fidencio Síntora Constantino, quien ganó fama en todo México gracias a sus milagrosos dones de curación de enfermedades y es llamado el Niño Fidencio.
En los próximos días, miembros de la Iglesia Cristiana Fidencista acudirán a iglesias y capillas para hacer ofrendas y pedir por su sanación, además de que se realizarán rituales en su nombre.
TE PUEDE INTERESAR: ¿Quién fue La Taconera?... La aterradora historia que estremece las calles de Saltillo
EL NIÑO FIDENCIO CURÓ A UN PRESIDENTE DE MÉXICO... ¿QUÉ DICE LA LEYENDA?
El Niño Fidencio llegó a su punto máximo de popularidad en el siglo XX, cuando la Presidencia de México estaba ocupada por Plutarco Elías Calles, quien estaría sufriendo de lepra al igual que su hija.
Según cuenta la leyenda, el presidente visitó a varios médicos y expertos en salud, aunque sin conseguir un tratamiento exitoso; hasta que uno de sus allegados le habló de un famoso curandero que empezaba a ganar renombre en la región de Espinazo, en Monterrey, Nuevo León.
El mandatario se trasladó a la entidad el 8 de febrero de 1928 en el tren El Olivo, con la esperanza de ser curado. Al llegar, observó que el Niño Fidencio realizaba operaciones con vidrios de botellas rotas y sanaba a las personas con lodo, cantos y sobadas.
Se cuenta que Fidencio recibió a Plutarco Elías Calles de buena forma. Luego se procedió a tratar la lepra que aquejaba al presidente, la cual fue tratada ‘milagrosamente’ con miel.
La tradición oral en México explica que: “El Niño le untó miel de abeja, lo dejó en un cuarto. El presidente, incrédulo, le dijo que había viajado desde muy lejos como para que solo le pusieran mil. Pero después de unas horas ya estaba curado”.
¿QUIÉN FUE EL NIÑO FIDENCIO Y POR QUÉ SE LE DICE ‘NIÑO’ SI YA ERA ADULTO?
José Fidencio Constantino Síntora nació el 17 de octubre de 1898 en Irámuco, Guanajuato, y falleció el 19 de octubre de 1938 en Espinazo, Nuevo León, a sus 40 años de edad. Según se ha revelado, el acta de defunción indica que el fallecimiento fue por fiebre, aunque también se ha dicho que fue por una crisis hepática.
Durante sus últimos años de vida, el Niño Fidencio atraía a miles de peregrinos que buscaban sanar. Con el tiempo, la figura milagrosa se convirtió en un referente de espiritualidad en México.
TE PUEDE INTERESAR: La leyenda de “Pascualita”: ¿cuerpo embalsamado o un maniquí?
Trascendió que el Niño Fidencio no se casó ni tuvo desarrollo sexual, además de que, presuntamente, tenía una condición médica que lo hizo adoptar una apariencia infantil por su voz aguda y su piel lampiña.
¿CÓMO SE HIZO FAMOSO EL NIÑO FIDENCIO?
La visita del presidente hizo que los medios de comunicación de aquellos tiempos prestaran más atención. De esta forma, la popularidad de Fidencio se expandió llegando hasta el sur de Estados Unidos.
Reportajes refieren a que el Niño Fidencio recibía principalmente a personas originarias de Baja California, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas, Arizona y Texas.
En esta época surgieron críticas de médicos y especialistas, quienes calificaron a José Fidencio como un charlatán, por sus cuestionables métodos. El Niño realizaba operaciones sin anestesia e indoloras y hacía curaciones arrojando objetos hacia la persona enferma debajo de un árbol de pirul.
¿CUÁLES SON LAS ORACIONES O MANDAS QUE SE HACEN AL NIÑO FIDENCIO?
Las personas que se acercan al Niño Fidencio piden principalmente por sanación, protección contra el mal, prosperidad y acompañamiento en problemas personales. Grupos de Facbook han compartido oraciones que le hacen a Fidencio:
1. Salud y protección:
“Santo Niño Fidencio, te ruego por mi salud y la de mis seres queridos. Protégeme de todo mal, tanto físico como espiritual. Aléjame de los espíritus malignos y cúrame de las dolencias que me aquejan.”
2. Prosperidad y ayuda:
“Niño Fidencio, me acerco a ti con fe y esperanza. Pido tu bendición, fuerza y luz para resolver mis problemas financieros y diarios. Ayúdame a abrir mis caminos al éxito y a que no me toquen las piedras del tropiezo.”
3. Para alejar el mal:
“Niño Fidencio, te suplico alejes de mi vida todo lo negativo. Ayúdame a que mi vida florezca y a no sentirme atada por brujería, hechizos o ritos. Que tu poder me proteja y me dé paz espiritual.”
TE PUEDE INTERESAR: Historias de Terror... El Niño del Panteón de Belén: la leyenda más escalofriante de Guadalajara
¿QUÉ SON LAS ‘CAJITAS’? ASÍ ES COMO LA TRADICIÓN DEL NIÑO FIDENCIO PERMANECE HASTA EL DÍA DE HOY
Después de la muerte del Niño Fidencio se creó la Iglesia fidencista, a través de la cual se realizan peregrinaciones cada año.
Asimismo, se conservan las llamadas ‘cajitas’ o ‘materias’ que, según creyentes, son personas que son poseídas por el espíritu del Niño Fidencio, quienes adoptan los dones de curación y sanación. Estas personas entran en una especie de trance y se convierten en un medio por el cual se hacen los milagros.