A esto se comprometió México al firmar el T-MEC
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El presidente Enrique Peña Nieto firmó este viernes el nuevo pacto comercial con el que el país estará sujeto a reglas de origen más estrictas en el sector automotor
Los mandatarios norteamericanos Enrique Peña Nieto, Donald Trump y Justin Trudeau firmaron este viernes el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), lo que significa que el país tendrá nuevas reglas comerciales una vez que los congresos de las tres naciones aprueben el acuerdo.
Sin embargo, antes de que eso suceda, México tendrá que hacer algunos ajustes en la legislación a los que se comprometió en la negociación.
Uno de ellos es hacer modificaciones en materia laboral para dar garantías en aspectos de representación colectiva, cambios que, de acuerdo con integrantes del equipo del Gobierno entrante, quedarán listos antes del 31 de diciembre.
“Por supuesto se viene un proceso de armonización del marco jurídico con el tratado, hay materias importantes como la laboral, todo el tema de representación colectiva efectiva, los contratos colectivos de trabajo”, indicó Juan Rodrigo Moreno, consejero delegado de asuntos internacionales de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y miembro del Cuarto de Junto durante la renegociación del acuerdo.
El empresario agregó que el proceso para armonizar las leyes nacionales servirá para implementar de forma correcta lo acordado en el tratado signado este viernes.
“Hay también retos importantes en materia de propiedad industrial, comercio digital y anticorrupción, entre otros temas, como la implementación plena del sistema nacional anticorrupción, con todos los cambios que implica, desde el sistema de transparencia hasta llegar a los sistemas locales anticorrupción", expuso.
Áreas polémicas en el nuevo pacto comercial Con respecto a los cambios más drásticos y complicados de consensuar estuvieron los realizados a las reglas de origen automotriz, con lo cual se incrementaron los niveles del contenido regional a 75 por ciento en vehículos ligeros y 70 por ciento en vehículos pesados.
Además se agregó a la ecuación un 40 por ciento de contenido proveniente de zonas con salarios arriba de los 16 dólares.
“(La regla de origen) es algo que va a jalar inversión a Norteamérica, porque exiges mucho más contenido regional, entonces aumenta la inversión en Norteamérica y sí que la aumenta porque Estados Unidos es la mayor economía del mundo y está creciendo mucho y para hacerlo van a aumentar la inversión en Norteamérica”, comentó Jesús Seade, jefe negociador del equipo de transición y próximo subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), en entrevista previa.
Sin embargo, la próxima subsecretaria de Comercio Exterior, Luz María de la Mora, aceptó que el incremento en el nivel de contenido fue una decisión que tarde o temprano resentiría el sector automotor.
“(El acuerdo) tiene mejoras sustantivas en algunas áreas, sobre todo lo que es servicios, economía digital, comercio electrónico, y sí tiene algunos costos que tuvimos que pagar, específicamente en el sector automotriz, pero eso ya sabíamos que era lo que quería el presidente Trump, entonces como dice el dicho, ‘de lo perdido lo que aparezca’”, agregó.
Otro de los cambios en el texto obligará a las tres naciones a realizar una revisión periódica del acuerdo cada seis años, y si los países están de acuerdo con el desarrollo comercial del T-MEC se realizaría una renovación por 16 años extra. De lo contrario, el acuerdo expiraría a los 10 años.
Asimismo, en el T-MEC, los países se comprometieron a mantener regímenes de libre flotación para las tasas, con lo que se busca evitar que se maneje el tipo de cambio para obtener ventajas competitivas desleales.
“Cada parte confirma que está obligada por los artículos del acuerdo del Fondo Monetario Internacional (FMI) a evitar manipular los tipos de cambio o el sistema monetario internacional para evitar el ajuste efectivo de la balanza de pagos o para obtener una ventaja competitiva desleal”, suscribe el capítulo Política Macroeconómica y Tipo de Cambio.
En la región de América del Norte se comercializan más mil millones de dólares de manera anual. Si los Congresos de cada país aprueban el T-MEC, las reglas del juego comercial de América del Norte se renovarán el próximo 1 de enero de 2020.