Guerra de bandos causa temor en Sonora y BC; partidarios de ‘El Chapo’ contra de ‘El Mayo’
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SAN LUIS RÍO COLORADO, SON. - Fue el 1 de junio cuando se conoció sobre la muerte del “Morgan”, joven de 28 años, que portaba en su cadáver un llamativo mensaje. “Todo el que apoye al “Ruso”, “Isrra”, “Piña”, “Pably”, “Mario Cabezón” y al “Tochín”, el “Wasteko” y “Omega” les va a pasar lo mismo JG. Somos “Los Menores” nosotros no matamos inocentes... Tamos con el pueblo. Están peliando una causa perdida ATTE: LA CHAPIZA 701” (sic)..
El poblado donde ocurrió este hecho, de 11 mil 800 habitantes, es el mismo, pero del lado de Sonora se llama Luis B. Sánchez y pasando el callejón se llama Estación Coahuila.
Aunque todos sabían que Los Salazar llegarían, esperaban que no ingresaran al pueblo, donde Jesús Alexander Sánchez Félix, “El Ruso”, operador de Ismael Zambada, “El Mayo”, tiene una de sus casas de seguridad. Los lugareños insisten en que el asesinato del “Morgan” fue por orden de Los Salazar o de Los Chapitos.
“El Ruso” forma parte del Cártel de Sinaloa que, según la agrupación InSight Crime, vive una disputa interna entre el viejo líder “El Mayo Zambada” y los hijos de Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”.
El proceso judicial que desembocó en la condena a cadena perpetua para “El Chapo” Guzmán, y donde Vicente Zambada, “El Vicentillo”, hijo del “Mayo”, testificó en su contra, habría desencadenado las diferencias, que se intensificaron con la detención de Ovidio Guzmán López en el operativo federal ya conocido como “el culiacanazo”, cuando Zambada rechazó participar con Los Chapitos en la liberación del joven Guzmán.
Aunque “El Chapo” tiene varios hijos reconocidos, sólo Ovidio Guzmán López, Jesús Alfredo e Iván Archivaldo Guzmán Salazar forman parte de Los Chapitos o Los Menores. A ellos se aliaron Los Salazar, viejos colaborados del cártel que tienen base en Chihuahua.
Crispín Salazar y su hermano Adán Salazar Zamorano son las cabezas visibles del grupo. Dominan tres cuartas partes del territorio de Chihuahua en representación del Cártel de Sinaloa, incluyendo la frontera con Estados Unidos, a excepción de un corredor en la parte central del estado, que lidera el Cártel de Jalisco Nueva Generación.
El lado suroeste de Sonora también es controlado por Los Salazar y el Cártel de Sinaloa, pero las diferencias entre El Mayo Zambada y Los Chapitos ha provocado luchas encarnizadas.
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El asesinato del “Morgan” anunció a los habitantes de Sonora y Baja California que la guerra entre ambos grupos había comenzado. Los Salazar se anunciaron como aliados del “Chapo”, enemigos del “Ruso” y del “Mayo”.
Según el semanario Proceso, desde el 9 de enero, cuando en la vecina ciudad de Mexicali apareció una manta firmada por Los Salazar donde se anunciaba el cobro de piso a casas de cambio, los pobladores del valle tuvieron claro que los cercaban, al este en Mexicali y al oeste en San Luis Río Colorado, Sonora.
Ambos bandos empezaron a cobrar por la plaza, aunque todos pertenecen al Cártel de Sinaloa: Los Salazar respaldan a Los Chapitos y “El Ruso” y “El Omega” al “Mayo” Zambada.
La madrugada en que el cadáver del “Morgan” fue localizado, envuelto en una cortina, degollado, con el tiro de gracia y mutilado de sus genitales, el pueblo entró en pánico. “Viene la guerra, lo sabemos, y en medio estamos nosotros”, dice un locatario.
De uno y otro bando empezaron a aparecer ejecutados. En las estadísticas nacionales de ejecuciones, la zona de Mexicali y su valle ocupa el lugar 23 y Tijuana encabeza la lista. Según el Sistema Nacional de Seguridad Pública, de enero a mayo pasado se cometieron 92 asesinatos en la capital de Baja California y 749 en Tijuana.
Las autoridades no han informado seguimiento alguno al caso. A partir de ese día, el poblado se convirtió en una fortaleza, vigilada en sus siete entradas por “El Ruso” y su gente.
El pasado 14 de mayo el Ejército, la Guardia Nacional y la Policía Municipal de Mexicali estuvieron a punto de detener al “Ruso”. Esa madrugada Sánchez Félix cenaba con su gente en una taquería cuando llegó la alerta por la presencia de hombres fuertemente armados.
Sin embargo, dos agentes de la Fiscalía General de la Républica arribaron para presuntamente sobornarlos con 80 mil dólares, aprovechando esto, “El Ruso” escapó y sólo detuvieron a nueve personas.