Consideran injusto Tratado de Aguas
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Las entregas establecidas a México en el marco legal para el Río Bravo, además de ser insostenibles, implican que el País asuma la carga total de la escasez hídrica
El mecanismo de deuda hídrica en el Tratado de Aguas de 1944 es desigual para los mexicanos, perjudicando particularmente al sector agrícola, debido a que, en casos de sequía extraordinaria, México no puede reducir sus entregas a la nación vecina, mientras que Estados Unidos, sí puede, concluye un estudio en la revista académica Water International de la International Water Resources Association.
Las entregas establecidas a México en el marco legal para el Río Bravo, además de ser insostenibles, implican que el País asuma la carga total de la escasez hídrica y sacrifique sus propias reservas, lo que compromete el riego agrícola en Nuevo León, Tamaulipas, Chihuahua y Coahuila, de acuerdo con la investigación.
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En contraste, agregaron los expertos, Estados Unidos tiene el privilegio de reducir sus entregas de agua a México en casos de escasez persistente en el Río Colorado y la parte alta del Río Bravo (también conocido como Río Grande) según las reducciones que esté aplicando a sus propios usuarios agrícolas y urbanos.
Este mecanismo conocido como “reducción proporcional” significa que si, por ejemplo, ante la sequía en cualquiera de esos dos ríos, Estados Unidos redujo a sus agricultores y ciudades el uso del agua en un 10% anual, puede entregar ese año 10% menos líquido a México.
Los especialistas destacaron que, mediante tales disposiciones jurídicas, México siempre está en riesgo de adquirir una deuda hídrica con el país vecino, mientras que EU queda exento de esa posibilidad.
Recordaron que, en el 2020, México fue obligado a pagar a Estados Unidos con agua de sus reservas, con todo y la grave sequía que padecía, quedando en peligro los distritos de riego en las entidades fronterizas.
Consideraron urgente actualizar el Tratado, firmado hace más de 80 años, a fin de que la asignación de recursos hídricos sea justa y realista.
“La interpretación estricta y la aplicación rigurosa de los criterios establecidos en el Tratado de 1944 están llevando a ambos países hacia un callejón sin salida”, señala el artículo académico.
“Cuando México no logra asignar el volumen requerido a Estados Unidos, igualmente deja de garantizar la asignación de agua aguas abajo para sus propios Estados y comunidades fronterizas”, indica.
Apenas esta semana pasada, la Administración Trump advirtió a México que debe cubrir su adeudo hídrico con Estados Unidos, lo que amenaza el agua de la presa El Cuchillo, principal fuente de abasto del área metropolitana de Monterrey. A pesar de que ni El Cuchillo ni la presa Marte R. Gómez de Tamaulipas están consideradas en el Tratado de hace más de 80 años, el Gobierno de Claudia Sheinbaum firmó en noviembre del 2024 la Minuta 331 de la CILA, en la que accedió a que se use para cubrir el adeudo la cuenca del Río San Juan, donde se encuentran ambos embalses.
Fundada en 1971, la International Water Resources Association se describe a sí misma como una organización no gubernamental sin fines de lucro, especializada en la investigación sobre la gestión sostenible del agua a nivel mundial.
Actualmente es encabezada por el investigador chino Yuanyuan Li, pero del 2019 al 2021 la dirigió el abogado estadounidense Gabriel Eckstein, quien firma el estudio junto con Rosario Sánchez y Stephen P. Mumme.