Detienen a 22 presuntos delincuentes tras ola de asesinatos en Ciudad Juárez
En el operativo también se decomisaron 32 armas de fuego de diverso calibre
La madrugada del 10 de julio, Ciudad Juárez despertó con una noticia escalofriante: en menos de 24 horas, 22 personas habían sido asesinadas en distintos puntos de la ciudad. Los habitantes, acostumbrados a vivir bajo la sombra de la violencia, sintieron que esta vez algo se había desbordado.
Los crímenes no fueron aislados. Se esparcieron como un reguero de pólvora por colonias como Del Safari, Riveras del Bravo, Águilas de Zaragoza y Aztecas. Cada lugar tenía su propia escena trágica, y la policía local apenas podía contener la magnitud del caos. Las primeras pistas apuntaban a una disputa entre grupos del crimen organizado vinculados al narcomenudeo, específicamente por el control en la venta de metanfetaminas, conocidas como cristal. El propio alcalde, Cruz Pérez Cuéllar, lo confirmó en entrevistas: “Estamos trabajando muy duro para contener esto y que se mantenga en un tema entre grupos del crimen organizado”.
La respuesta del gobierno estatal no se hizo esperar. La gobernadora Maru Campos ordenó un operativo urgente, coordinado por la Secretaría de Seguridad Pública. El despliegue fue amplio: dos aeronaves sobrevolaron la ciudad, mientras agentes fuertemente armados realizaban cateos y patrullajes por tierra. Cuatro días después, el 14 de julio, el secretario Gilberto Loya se presentó ante los medios para rendir cuentas. El resultado fue contundente: 22 personas detenidas, todas presuntas responsables o relacionadas con la ola de homicidios.
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Pero las capturas no fueron lo único que se logró. El operativo también permitió el decomiso de 32 armas de fuego —24 largas y 8 cortas—, más de mil cartuchos, 19 cargadores y cinco vehículos que, según los registros de la Plataforma Centinela, estarían vinculados con los hechos. Además, se incautaron más de 100 dosis de cocaína y marihuana, lo que confirmaba el móvil narco detrás de la violencia.
“Se tuvo el aseguramiento de 22 personas, presuntos delincuentes, todos estos relacionados de alguna manera con los homicidios que se dieron en la semana”, explicó Loya. También reveló que se hicieron ajustes administrativos en las fuerzas de seguridad, reorganizando turnos para asegurar una cobertura continua y rápida de los incidentes.
Mientras las investigaciones continúan y los detenidos son puestos a disposición del Ministerio Público, Juárez sigue intentando recuperar el aliento. El miedo no se ha ido, pero al menos, por ahora, hay una señal clara de que las autoridades están tomando acciones.
