Pega desgaste de percepción de gobernanza a perfil crediticio

El desgaste en la percepción de la gobernanza en México podría exponer al perfil crediticio del País debido a que este rubro tiene un peso importante para las agencias calificadoras al momento de emitir su nota al soberano, de acuerdo con analistas.

Luis Gonzali, codirector de inversiones en Franklin Templeton México, señaló que las calificadoras, en específico Fitch, contemplan muchos factores para determinar una nota soberana, pero hacen énfasis en los niveles de gobernanza, ya que este rubro pesa alrededor de 20 por ciento en su modelo de calificación crediticia.

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”Uno de los factores más importantes que consideran las calificadoras es la gobernanza y las métricas de gobernanza en México se están deteriorando”.

”En México, los factores de gobernanza están alrededor de la mediana de los países que tienen una calificación crediticia B, es decir, varios niveles abajo de nosotros, mismo caso ocurre con los factores sobre la aplicación de la ley”, expuso Gonzali.

Actualmente, Fitch tiene asignado a México con una nota de BBB- con perspectiva estable, y comparte esta nota con países como Grecia, India o Rumania.

Las Naciones Unidas señalan que el concepto de gobernanza hace referencia a todos los procesos de gobierno, instituciones, procedimientos y prácticas mediante los que se deciden y regulan los asuntos que atañen al conjunto de la sociedad.

La buena gobernanza añade una dimensión normativa o de evaluación al proceso de gobernar. Los atributos de la buena gobernanza son: la transparencia, responsabilidad, rendición de cuentas, participación y capacidad de respuesta a las necesidades de la población.

Sin embargo, la realidad en el País parece estar apartada de los señalamientos anteriores.

De acuerdo con la encuesta del Banco de México (Banxico) a analistas privados, en los primeros nueve meses del año el principal factor que ellos consideran podría obstaculizar el crecimiento económico del País en un lapso de seis meses se asocia con la falta de gobernanza.

A nivel particular, los analistas han remarcado dos factores que podrían limitar la actividad económica: la incertidumbre política interna y los problemas de inseguridad pública.

”La gobernanza en México podría haberse deteriorado por las reformas constitucionales y por lo tanto podríamos ver que el modelo empieza a indicar que la perspectiva en México se vuelva negativa”, anotó Gonzali.

Por lo anterior, eventualmente podría haber una baja de calificación en la nota de México, pero la degradación no sería ni inmediata o en el corto plazo, dijo.

”Las bajas de calificación no ocurren de la noche a la mañana. Primero se da una baja en la perspectiva. Entonces antes de ver una degradación en México vamos a ver que Moody’s, Fitch o S&P van a salir a decir”.

”Y si las cosas no mejoran, entonces sí van a detonar una baja de calificación en los siguientes 12 a 18 meses. Pero la degradación no es inminente, la primera señal va a ser un cambio de perspectiva”, explicó el analista.