Niño de 9 años, asesinado en tiroteo masivo en Texas, era ‘amigo’ del hijo del sospechoso
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Daniel Enrique Laso, quien fue asesinado a tiros mientras intentaba proteger a su madre en el alboroto, “llevaba su bicicleta a donde se detendría el autobús escolar
El niño de Texas de 9 años, asesinado a tiros al estilo ejecución junto con cuatro parientes, era amigo del propio hijo del sospechoso, según un tío.
Daniel Enrique Laso, quien fue asesinado a tiros mientras intentaba proteger a su madre en el alboroto, “llevaba su bicicleta a donde se detendría el autobús escolar”, dijo a NBC News su tío Ramiro Guzmán, un sobreviviente de la masacre del viernes por la noche.
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“A veces iban juntos, mi sobrino y su hijo”, dijo Guzmán sobre el sospechoso Francisco Oropesa, de 38 años, a quien el agente del FBI a cargo llamó “monstruo”.
“Siempre iban juntos en sus bicicletas”, dijo sobre el hijo del vecino. “Eran como amigos. Y lo mató”, dijo Guzmán.
Guzmán describió cómo sobrevivió escondiéndose en un armario mientras su enfurecido vecino Oropesa, también conocido como Oropeza, buscaba víctimas en la casa rural del área de Houston con un rifle estilo AR-15.
Pudo proteger a su propia esposa e hijo, pero salió para ver a su sobrino herido de muerte, quien recibió un golpe en la espalda y el brazo.
“Estaba retorciéndose en el piso y dije, ‘Dios mío, todavía está vivo’”, dijo Guzmán a NBC News sobre su sobrino.
“Mi sobrino, a pesar de todo, pensé que sobreviviría”, dijo sobre el niño que era como un segundo hijo. “Era un gran chico”.
Guzmán también vio el cuerpo asesinado de su hermana, la madre de Daniel, Sonia Argentina Guzmán, de 25 años. El niño murió mientras trataba de protegerla, según su padre, otro de los sobrevivientes.
“Verla, como yo la vi, es increíble”, dijo Guzmán sobre su hermana. Todavía creo que tal vez ella me llamará, que la volveré a ver y que ella será, como siempre, fuerte y nos apoyará en todo”, dijo.
“Ella era la mejor hermana. Ella nos apoyó en todo, absolutamente todo”. Dijo que su hermana no ha visto a su madre en Honduras durante 10 años después de mudarse con su familia a los Estados Unidos.
“Todos vienen aquí con un plan, con una meta”, dijo Guzmán a NBC. “Ahora mi mamá va a ver a mi hermana, pero de la peor manera. Va a ver a mi sobrino de la peor manera”.
La madre y el hijo fueron asesinados junto con otros tres en la casa en Cleveland, Texas: Julisa Molina Rivera, 31, Diana Velázquez Alvarado, 21 y José Jonathan Casarez, 18.
El alguacil del condado de San Jacinto, Greg Capers, dijo anteriormente que los cinco recibieron disparos desde el cuello hacia arriba, “estilo ejecución”.
La policía recuperó el rifle estilo AR-15 usado por Oropesa, quien permaneció prófugo el martes a pesar de una persecución masiva y una recompensa combinada de $80,000.
“Les pedimos a todos su ayuda para que podamos llevar a este sospechoso, o este monstruo, lo llamaré, ante la justicia”, dijo el agente especial a cargo del FBI en Houston, James Smith.
El sospechoso es un ciudadano mexicano que ha sido deportado cuatro veces desde 2009, confirmó el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) de EE. UU. Fue nuevamente detenido y deportado en septiembre de 2009, enero de 2012 y julio de 2016.
