El presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró en diversas ocasiones durante su mandato la necesidad de una reforma al Poder Judicial, la cual podría concretarse este septiembre tal como ha planteado, pese a las advertencias de que es regresiva.
El mandatario ha justificado su propuesta bajo el argumento de que el actual Poder Judicial se encuentra podrido y que con su reforma se garantizará el acceso a la justicia porque, a través del voto popular, los jueces, ministros y magistrados servirán al pueblo y no a otros intereses.
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