Coahuila ante el futuro: Los desafíos de Manolo Jiménez

Opinión
/ 3 diciembre 2023

Manolo Jiménez Salinas asumió el cargo como gobernador de Coahuila con una legitimidad muy distante de lo ocurrido hace seis años.

En su toma de protesta, la de los ciudadanos, el gobernador anunció un gobierno con un rumbo establecido en cinco ejes: seguridad y orden, Coahuila global, desarrollo humano, infraestructura sostenible, y ciudadanía y buen gobierno.

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A partir de esos ejes prometió una serie de acciones y obras como la creación de cuarteles para la policía estatal, casetas de vigilancia en los municipios, representaciones del gobierno en Ciudad de México, Estados Unidos, China y Europa; la tarjeta de la salud, recarpeteos, ampliaciones de vialidades, la creación de consejos ciudadanos y la firma de convenios con fundaciones y organismos nacionales e internacionales.

A partir de estos ejes, ¿cuáles serían los desafíos del nuevo gobernador?

En seguridad sí, sí hay una disminución de los delitos de alto impacto como homicidios dolosos o secuestros. Pero hay muchos retos: mantener los estándares y percepción de seguridad que tiene la entidad, atender el tema de las desapariciones y atender los señalamientos de abusos y violaciones a los derechos humanos de la policía estatal.

Coahuila global tendrá que ser algo más allá de un nombre bonito. Dijo que su gobierno será uno de “hechos y resultados contundentes”. El tema económico será un buen termómetro frente a diversos desafíos, como la situación de la región Centro y Carbonífera, los rezagos en temas de salarios en La Laguna, la dotación de servicios públicos de calidad a nuevas inversiones, el acercamiento del nearshoring a municipios pequeños, y que las representaciones comerciales que propuso no se conviertan en vacaciones con costo al erario.

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En el tema de desarrollo humano, que la tarjeta de la salud no se convierta en un instrumento de clientelismo electoral, concretar los planes que refirió sobre la atención a la salud mental, un rubro que ha sido descuidado por la falta de opciones de tratamiento que existen en la entidad. Y aquí se tendría que incluir algún plan en materia de prevención y atención a las adicciones en un contexto en el que el cristal es consumido con mayor frecuencia desencadenando en otras problemáticas. El Estado no cuenta con recursos, pero, sobre todo, con una política y estrategia para atender el tema como un asunto de salud pública.

Además, aquella frase de que el Palacio de Gobierno “va a ser la casa de gestión más grande de Coahuila”, tendrá que ser algo más que palabras frente a descontentos sociales de distintos grupos como maestros, activistas de los derechos humanos, familias de personas desaparecidas, defensores del agua, entre otros.

En tema de infraestructura sostenible, el mayor desafío del gobernador Jiménez Salinas será hacer inversión pública con un presupuesto consumido por el pago a la deuda. El sexenio pasado apenas destinó 4.6 por ciento del presupuesto total de la administración al tema de obra pública. Otro desafío será la transparencia frente al incremento del ISN y los futuros proveedores y contratistas del gobierno.

Además, estará el tema de hacer obra pertinente, con impacto y trascendencia, y no obra innecesaria y sólo de relumbrón.

Por último, el eje de ciudadanía y buen gobierno. El desafío no será crear consejos ciudadanos, sino que estos no se conviertan únicamente en figuras creadas para legitimar acciones de gobierno.

En el discurso, hablar de sinergia y corresponsabilidad suena bonito, hasta que grupos especializados, académicos o activistas critican acciones de gobierno.

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AL TIRO

El gobernador Manolo Jiménez habló en sus primeros discursos de emprender una cruzada de combate a la corrupción y la impunidad. De ir más allá de la transparencia y rendición de cuentas.

Al igual que otros temas, suena bien en la retórica, pero muchas veces se cae a las primeras acciones de hermetismo y opacidad.

Todo discurso se convierte en polvo cuando, como dijo el gobernador, no hay hechos y resultados contundentes.

El reto está allí.

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