La plasticidad de la movilidad urbana

Opinión
/ 17 abril 2024

Hablar de la plasticidad de la movilidad urbana es hablar de la oportunidad de transitar fácilmente entre las distintas expresiones de movilidad para quienes se desplazan por distintos motivos en una ciudad. Se presenta de manera óptima cuando se logra configurar un sistema integral de movilidad, susceptible de adaptarse y transformarse en respuesta a las demandas y necesidades de los habitantes.

La comodidad en las transferencias de una a otra forma de trasladarse determina en buena medida qué tan plástica es la movilidad de una ciudad. Evidentemente, llegar a estas condiciones no es sencillo, precisa de abordar distintos aspectos que son fundamentales para hacerlo posible.

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Uno de estos aspectos es la adaptabilidad a la demanda. Los sistemas de transporte deben poder ajustarse a la forma en que varía la demanda de viajes, tanto desde la perspectiva de las horas de demanda intensiva y las de demanda regular, como desde la demanda que deriva de aumento en la densidad, nuevos nodos de atracción urbana y urbanización de espacios vacantes.

Por otro lado está la multimodalidad. Consiste en que las ciudades ofrezcan una variedad amplia de opciones de transporte que sean complementarias entre sí. Es decir, debe ser fácil para una persona ser en un momento usuaria del transporte público para luego utilizar una bicicleta o continuar su recorrido a pie, o incluso encontrar la manera de intercalar estas opciones de movilidad con el uso de vehículos privados. Esto permite diversificar la oferta de movilidad y da a las personas usuarias la posibilidad de acudir a estas opciones de acuerdo a sus necesidades específicas.

Se debe tener en cuenta también la resiliencia de la movilidad urbana. Esto consiste en que la movilidad urbana debe ser capaz de recuperarse rápidamente de interrupciones en su funcionamiento, como las provocadas por accidentes, por obras viales o por fenómenos climáticos severos, considerando también la posibilidad de continuar el traslado con un medio alternativo, manteniendo la funcionalidad del sistema general de movilidad urbana.

También es de gran relevancia la innovación tecnológica. La proliferación de nuevas tecnologías, sistemas de información en tiempo real y de aplicaciones móviles asequibles y fácilmente accesibles, son activos eficientes para la mejora en la eficiencia y la flexibilidad de los sistemas de transporte. No es lo mismo que una persona intuya con información básica las opciones de traslado disponibles, a que las pueda identificar a partir de información completa, organizada, sistematizada e interrelacionada.

Asimismo es necesario considerar la posibilidad de adaptación de la movilidad a políticas públicas y proyectos que guardan dinámicas cambiantes. Se debe poder modificar las estrategias de movilidad integral para adaptarles a la nueva realidad y alinearles con las prioridades de interés público. Por ejemplo, adaptarse a la necesaria reducción de emisiones, a la generación de oportunidades de movilidad seguras para las mujeres, a la equidad social en el acceso al transporte o la revitalización de áreas urbanas que resultan prioritarias a partir de las líneas estratégicas que dicta la planeación urbana.

Finalmente, pero no menos importante, es vital mantener una efectiva participación ciudadana. La principal fuente de información para conocer de manera puntual, objetiva y precisa las necesidades y preferencias de traslados, está en las personas usuarias. Se les debe involucrar de manera activa en la planeación de movilidad urbana, políticas de suelo, y en la toma de decisiones sobre la forma de incentivar las opciones de movilidad de menor costo y mayor eficiencia, económica y ambientalmente sostenibles.

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Una herramienta que COPERES ha propuesto recurrentemente para Saltillo, y que se encuentra considerada en el Plan 2040 para la Región Sureste, es la incorporación de centros de transferencia modal en los polígonos correspondientes al centro urbano, al centro metropolitano y a los subcentros de la ciudad considerados en la Actualización del Plan Director de Desarrollo Urbano de 2022. Esto permitiría gestionar eficientemente las distintas opciones de movilidad bajo criterios de intermodalidad a esta escala poligonal, para después vincularle en un sistema ya de escala de ciudad.

Una ciudad con alternativas viables, pertinentes, asequibles, cómodas y seguras para desplazarse, tanto de manera motorizada como no motorizada, logrará para su movilidad urbana un futuro posible.

jruiz@imaginemoscs.org

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