Ariel Gutiérrez, cineasta de Saltillo, recibe apoyo internacional para su primer largometraje

Desde hace cerca de tres años el realizador saltillense Ariel Gutiérrez Flores comenzó la búsqueda de inversores para su primer largometraje “Toda una vida”, que filmará en Saltillo y que presentará un historia sobre “lo doloroso que es crecer”.

A poco de consolidar el financiamiento necesario para comenzar la pre-producción y filmaciones, el cineasta recibió este mes de marzo, un Premio de Distribución en el Málaga Festival Industry Zone MAFIZ, que apoya a proyectos en proceso o que están buscando un co-productor o inversiones.

“Como ya hemos consolidado una parte importante de financiamiento estamos participando en algunos foros para buscar una co-producción internacional, que básicamente lo que hace es ayudar a darle más proyección al proyecto una vez que esté filmado o realizado”, comentó en entrevista con VANGUARDIA.

“Nos dieron el premio de distribución, de una empresa argentina que se llama Films to Festivals, que se dedica a hacer una ruta crítica de festivales y a ayudar a que la película llegue lo más lejos posible una vez que esté finalizada. A nosotros nos dio mucho gusto y optimismo que nos hayan premiado, porque para nosotros es como empezar con el pie derecho, porque a pesar de que tenemos tiempo trabajando el proyecto y la película no está filmada aún, hay gente que le interesa mucho apoyarla, le tienen fe al proyecto”, agregó.

Gutiérrez, quien ya obtuvo el Estímulo a Creadores Cinematográficos 2020 del Instituto Mexicano de Cinematografía para esta misma obra, considera que los programas de apoyo y estímulo existentes en México son “muy generosos”, sobre todo en comparación a otras partes de Latinoamérica, pero que por lo mismo eso a veces evita que se busque más allá de nuestras fronteras.

“Al mirar hacia nosotros mismos a veces quizá nos perdemos de esa posible colaboración que hace crecer los proyectos”, compartió, “cuando hay una colaboración entre varios países tiende a que florezcan ciertas ideas o se desarrollen ciertos temas más universales”.

La película sigue un momento en la vida de un adolescente con una condición de obesidad, que vive en Saltillo en medio de una época violenta. A pesar de que este último punto es parte del contexto, Ariel recalca que el viaje personal del protagonista es lo que se impone en la trama.

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“En los últimos meses creo que ha habido una presencia mediática muy fuerte, que rara vez se solían escuchar, como el término de gordofobia”, expresó, “es interesante que todo lo que esté sucediendo, tanto en México como en el resto del mundo, ponga sobre la mesa estos temas que antes la gente solía dar por sentado, creo que es importante que nosotros revisemos cómo es que hemos estado mirando a las personas que tienen una condición de obesidad, cómo es que se han mirado a través de la lente de los medios de comunicación masivos y cómo eso ha afectado la percepción que tenemos en cosas que están incrustadas en nuestro propio hablar popular. A veces no nos damos cuenta de lo dolorosos y crueles que pueden ser los comentarios que hacemos”.

Con este apoyo, comentó el también creador del cortometraje “Los tiempos de Héctor”, reconocido en Cinéfondation del Festival de Cannes en 2018, espera poder comenzar con la producción a finales de este año o inicios del siguiente.