Guatemala comparte la diversidad de San Sebastián con arte
COMPARTIR
El proyecto #TodosSomosSanSebastián que empezó en Saltillo lanzó su segunda convocatoria para crear imágenes basadas en el santo, pero ahora con la participación mayoritaria de los artistas del vecino país del sur
Entre las saetas que lo penetran casi de pies a cabeza, y la sugerente posición en que por casi un milenio ha sido representado, San Sebastián fue adoptado por la comunidad LGBT+ hace poco más de cinco décadas como un símbolo de su lucha y sus propios martirios.
La imagen del santo amarrado a un árbol, perforado por flechas, ha sido reinterpretada de muchas maneras, y en 2020 la artista visual Natalia Blanco convocó bajo el proyecto #TodosSomosSanSebastián a decenas de creadores para continuar con esta tradición.
Ahora, la serie de estampas inspiró a un grupo de artistas en Guatemala, quienes en colaboración con Blanco y La Panorámica Editorial, lanzaron la segunda edición de esta serie, convocando a creativos del vecino del sur a tomar nuevamente la figura del santo para expresarse a través de él, en un evento en la capital de ese país donde las artes visuales y el performance.
“Es uno de los santos que tiene bastante devoción [en Guatemala]. Tiene su propia iglesia, su barrio, ya que es el santo contra las plagas y los terremotos, entonces en Guatemala, durante el tiempo de la Colonia en toda esa parte, cuando crearon los barrios, le dedicaron su espacio”, comentó para VANGUARDIA Eny Roland, uno de los artistas organizadores del evento.
“Aquí en Guatemala tenemos un proyecto que se llama La Fanzine, que se trata de gestionar actividades culturales, con temáticas LGBT y una revista. Entonces Natalia aplicó a esta revista y cuando vimos su trabajo nos gustó bastante y al ver su Instagram descubrimos este proyecto. Le propusimos si sería posible realizarlo en Guatemala”, agregó.
La convocatoria, en esta ocasión, reunió a 15 artistas invitados para realizar su obra inspirada en San Sebastián, la mayoría de Guatemala, pero también con presencia de México y El Salvador, quienes presentaron muy diversas apropiaciones del símbolo, en una exposición que se inauguró el pasado 22 de enero en la Galería de Pink Flamingos.
El evento, sin embargo, no se redujo a la mera exhibición de las imágenes, sino que también fue el espacio para la instalación de un altar a escala humana por un grupo de diseñadores de moda, y donde artistas del performance posaron como si se tratara del propio santo. Asimismo, también se contó con la participación de los DJ’s The Green Jesus y Oh my Goth, quienes “mezclaron” las obras en tiempo real, al ritmo de la música.
“Usualmente en la Fanzine hemos hechos colaboraciones con distintos artistas de Centroamérica y México, llevamos cinco años, este sería el sexto, donde lo que tratamos de visibilizar son las artes visuales y la literatura. En el caso de la colaboración con Natalia iba más a lo que es arte visual y le agregamos el performance”, mencionó sobre el trabajo de este colectivo, cuya revista sacará su convocatoria durante el mes de febrero.
En referencia a la relación de la comunidad de Guatemala con San Sebastián, Roland comentó que generó opiniones encontradas, dada la sexualidad que se le imprime a la imagen del santo—sobre las características ya sensuales de la imagen tradicional—, misma que escandalizó a algunos.
“Así como hay personas que nos han dicho que les encanta la idea de poderlo presentar de otras formas, también ha habido comentarios de que no les gusta, que creen que es así como sacrilegio. Hasta usaron la palabra abominación, lo cual me parece muy chistoso usarla en este tiempo”, expresó.
“Pero creo que eso es parte del arte. Lo que nosotros buscamos no es hacer un arte complaciente, sino un arte que cuestione y que sirva para conversar. No es que nosotros tengamos la verdad absoluta pero sí es bueno que cuando el arte te impacta te lo cuestiones, y preguntes, y nosotros como proyecto que te podamos responder y que haya una conversación sobre estos temas, porque al final lo que queremos es sensibilizar y abrir puertas”, añadió.
La exposición seguirá abierta al público unos días más, pero se tienen planes para llevar a cabo, de nuevo en colaboración con La Panorámica Editorial, una tercera edición de la convocatoria. Mientras tanto, siguen a la venta 5 cajas —de 20; el resto fue repartido entre los participantes— con las estampas de los seleccionados, que desde la imagen del santo hablan de censura, de liberación, de sexualidad y de diversidad.
“Vamos a hablar con Natalia y creo que funcionó bastante bien. Además, el 20 de enero es el Día de San Sebastián y el 22 se realizó la exposición. Entonces fue como el parteaguas para las actividades”, concluyó.