Niños superdotados de Saltillo cambian útiles escolares y uniformes por laptop’s y ropa de diario: ingresarán a la universidad en agosto
Después de obtener su certificado de estudios de preparatoria, los hermanos Alfredo y Juan Manuel Jiménez Valenciana, de 13 y 11 años respectivamente, se preparan para ingresar a cursos de inducción universitarios el próximo mes de agosto.
Fue en 2017 cuando Alfredo fue diagnosticado con coeficiente intelectual de 140 en el Centro de Atención al Talento (CEDAT) de la Ciudad de México, una institución dedicada a la atención profesional de niños y jóvenes con capacidades sobresalientes.
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Juan Manuel también fue diagnosticado en 2018 con una capacidad intelectual de 138. Él es aspirante a cursar una ingeniería en la Universidad Politécnica de Ramos Arizpe, y su hermano ingresará a la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas de la Universidad Autónoma de Coahuila, donde cada uno acreditó el examen de admisión.
“Ya estamos preparando toda la papelería que nos solicitan en las universidades, la primera quincena de agosto será para entregar esta papelería y luego ellos ingresarán a un curso de inducción, en la UAdeC empieza a mediados de agosto y en la UPRA será a finales del mes, estamos emocionados de esta nueva etapa”, comenta Sandra Valenciana, madre de los niños genio.
Señaló que hasta ahora todo el proceso ha sido diferente, pues los niños ya no requerirán de utensilios para las clases que llevarían normalmente a su edad, ahora necesitarán de otro tipo de herramientas para continuar con su trayectoria escolar.
“Estamos viviendo un proceso muy distinto al que hemos vivido anteriormente, ahora ya no hemos tenido que comprar mochilas, colores y cuadernos para cada materia, ellos lo que necesitan ahora son dispositivos móviles, laptop, carpetas organizadoras de estudio y también lo que va a cambiar es que ellos ya no utilizarán uniforme sino ropa del diario”, expuso.
Hasta ahora el proceso ha sido amable con la familia Jiménez Valenciana, por ahora Alfredo y Juan Manuel se encuentran emocionados y a la espera de incorporarse a clases presenciales.