Avión de combate ruso bombardea accidentalmente su propia ciudad
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El incidente que involucró a un avión supersónico Sukhoi-34 tuvo lugar el jueves por la noche
Un avión de combate ruso bombardeó accidentalmente la ciudad rusa de Belgorod, cerca de la frontera con Ucrania, provocando una explosión masiva que hirió a tres personas y levantó un automóvil sobre el techo de una tienda.
El incidente que involucró a un avión supersónico Sukhoi-34 tuvo lugar el jueves por la noche, causando una explosión y dejando un enorme cráter cerca del centro de Belgorod, ubicado a solo 25 millas de la frontera con Ucrania.
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El video de la escena mostró montones de basura tirada en la calle, varios autos destrozados y un edificio con ventanas rotas.
Las imágenes también mostraban un automóvil boca abajo sobre el techo de un supermercado a lo largo de una importante vía llamada Prospekt Vatutina.
El gobernador de la región de Belgorod, Vyacheslav Gladkov, anunció el estado de emergencia durante la noche y confirmó que había un cráter de 65 pies de ancho en una de las calles principales de la ciudad.
Tres residentes resultaron heridos en la explosión y cuatro automóviles y cuatro edificios de apartamentos sufrieron daños, agregó.
“Gracias a Dios, no hay muertos”, dijo Gladkov en un comunicado en Telegram.
Dos mujeres víctimas fueron hospitalizadas con heridas causadas por la explosión, y una tercera persona buscó atención médica más tarde por hipertensión.
El gobernador dijo que un edificio de apartamentos de nueve pisos fue evacuado como medida de precaución.
La agencia estatal de noticias TASS citó al Ministerio de Defensa ruso admitiendo que el cazabombardero supersónico Su-34 había descargado accidentalmente una munición no especificada.
“Mientras un avión de la fuerza aérea Sukhoi Su-34 volaba sobre la ciudad de Belgorod, hubo una descarga accidental de municiones de aviación”, dijo TASS citando al ministerio.
El ministerio no hizo comentarios sobre el tipo de artillería utilizada, pero los expertos militares dijeron que probablemente era una poderosa bomba de 1.100 libras.
La munición parecía haber sido configurada para explotar con un retraso de unos 18 segundos después del impacto, lo que le permitiría golpear instalaciones subterráneas en territorio enemigo.
Ya estaba en marcha una investigación sobre el bombardeo involuntario, según TASS.
Para colmo de males, un presentador de la televisión estatal rusa siguió las noticias sobre el bombardeo accidental de Belgorod leyendo un teleprompter que “las armas modernas permiten a las unidades rusas eliminar a los extremistas en el área de la operación militar especial desde una distancia mínima”.
El nuevo presentador se veía visiblemente desconcertado por el texto que acababa de leer en vivo al aire.
