Marilyn Cote: Abogada se hace pasar por psiquiatra, medica a sus pacientes y utiliza Photoshop para crear una vida falsa
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Sin credenciales en salud, Marilyn Cote empleaba cédulas falsas y promocionaba terapias en solo una semana, lo que generó preocupación y críticas en redes
En redes sociales, especialmente a través de la cuenta de Twitter CharlatanesMed, se ha revelado un caso alarmante que ha generado gran preocupación entre usuarios de internet. Marilyn Cote, una abogada originaria de Puebla, fue acusada de hacerse pasar por psiquiatra y de ofrecer supuestas curas rápidas para trastornos mentales complejos, como la depresión y la ansiedad, en tan solo una semana.
Marilyn Cote es licenciada en Derecho por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) y cuenta con estudios en criminalística y psicología, pero no posee formación ni acreditación para ejercer la psiquiatría. Aun así, logró construir una imagen de profesional de salud mental, asegurando que podía diagnosticar y tratar trastornos mentales.
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MARILYN COTE: SE PRESENTA COMO PSIQUIATRA, ES ABOGADA Y DA CONSULTA EN PUEBLA DE MANERA IRREGULAR
En su página web, se describe a sí misma como “egresada del Centro de Desórdenes Mentales de la Universidad de Oslo” y menciona supuestos reconocimientos en el campo del psicodiagnóstico, aunque no se han encontrado registros que respalden estas afirmaciones.
Además de los diplomas y títulos sin verificación, Cote ofrecía consultas presenciales en las Torres Médicas de Puebla y en San Diego, California, en donde presuntamente llegó a emitir recetas psiquiátricas sin tener formación en medicina. En las consultas, empleaba documentos que parecían legitimarse a través de cédulas profesionales, aunque los usuarios de redes sociales, encabezados por la cuenta @CharlatanesMed, descubrieron que dichas cédulas eran falsas y que la abogada solo poseía una cédula válida en el ámbito del Derecho.
CON DOCUMENTACIÓN FALSA, MARILYN COTE DIAGNOSTICABA Y PRESUMÍA LOGROS EN ÁREA MÉDICA
La investigación de usuarios en redes sociales reveló que Marilyn Cote utilizaba nombres de médicos en recetas psiquiátricas que, en realidad, no tenían ninguna relación con ella. Un ejemplo de esto es la aparición de recetas firmadas con el nombre del supuesto doctor Rodrigo Aquilino Orcajo Castelán, quien, según registros oficiales, no colabora ni tiene vínculo profesional con Marilyn Cote. Este descubrimiento generó inquietud sobre la veracidad de los diagnósticos y la validez de los tratamientos que recibían sus pacientes.
Diversos testimonios de ex pacientes han surgido en redes, compartiendo experiencias negativas tras haber recibido atención de la supuesta psiquiatra. Una de las afectadas reportó que, después de recibir un tratamiento farmacológico para tratar su ansiedad, comenzó a experimentar efectos secundarios adversos sin que hubiera mejoría en su salud mental. Esta paciente expresó que, además de la falta de resultados, notó que los métodos utilizados por Cote no correspondían a los de un tratamiento psiquiátrico profesional.
Este tipo de prácticas ha sido señalado por la comunidad médica como una amenaza, pues el tratamiento de trastornos mentales como la depresión y la ansiedad suele ser complejo, con atención especializada a largo plazo. Las promesas de Marilyn Cote sobre curas rápidas en tan solo siete días fueron calificadas como irresponsables y alarmantes por psiquiatras certificados.
MARILYN COTE SE CORONA COMO EL AMA DEL PHOTOSHOP: COMPARTE IMÁGENES ALTERADAS Y VIDEOS MANIPULADOS
En su página web y perfiles de redes sociales, Marilyn Cote incluía imágenes de supuestos colegas y una red de médicos con quienes decía compartir consultorios y colaboraciones profesionales. Sin embargo, usuarios descubrieron que muchas de las fotos utilizadas eran, en realidad, de modelos de catálogos en línea o de médicos en el extranjero sin relación alguna con ella. Uno de los ejemplos más notables fue una imagen de un “psiquiatra Joseph Scott”, cuya fotografía en realidad corresponde a un dentista en Rusia.
Además, Cote presuntamente empleaba videos generados con inteligencia artificial para simular conversaciones con otros profesionales médicos. En sus redes, llegó a promocionar colaboraciones con instituciones de salud a nivel mundial, afirmando haber trabajado con los “50 mejores hospitales del mundo”. Sin embargo, ninguna de estas afirmaciones ha sido confirmada, y varios usuarios descubrieron que los videos eran manipulados, lo cual aumentó las sospechas sobre sus actividades fraudulentas.
La asociación de 50 mejores hospitales del mundo ha emitido un comunicado deslindándose de cualquier relación con Cote.
De igual manera, Cote afirma ser escritora. Según sus publicaciones, la impostora lanzó el libro El Psicodiagnóstico de Rorschach en la Perfilación Criminológica e incluso realizó una presentación del mismo ante público. Sin embargo, dicho libro no está disponible en ninguna plataforma, y el ISBN 978-607-29-3826-7 no se encuentra registrado en la página oficial del Instituto Nacional del Derecho de Autor.
MARILYN COTE EMITE RESPUESTAS AGRESIVAS EN REDES SOCIALES ANTE CRÍTICAS DE USUARIOS
El comportamiento de Marilyn Cote en redes también ha generado controversia. En su perfil de Google, ante reseñas negativas y señalamientos de personas que cuestionaban sus tratamientos, respondió de manera desafiante y agresiva. En un caso, reaccionó a una crítica con el comentario: “Me encantaría que tuvieses el valor de decirme eso frente a mí”, lo cual incrementó la indignación de usuarios que calificaron su actitud como poco ética e inapropiada para una persona que, supuestamente, trabaja en el área de salud mental.
Ante la difusión de esta información, miembros de la comunidad médica han expresado su preocupación y han advertido a los usuarios de redes sobre el riesgo de recibir atención de personas sin la formación adecuada en salud mental. Profesionales de la psiquiatría han subrayado la importancia de verificar las credenciales de quienes ofrecen servicios de salud, especialmente en áreas sensibles como los trastornos mentales, donde los tratamientos requieren de seguimiento especializado y profesional.
La cuenta @CharlatanesMed, que inició la investigación en redes, ha instado a la población a denunciar este tipo de prácticas. La exposición de estos casos, aseguran, es fundamental para proteger a personas vulnerables que puedan buscar ayuda sin tener acceso a la información necesaria para evaluar la legitimidad de un profesional de salud.
🚨 #ÚltimaHora 🚨
— Rupi Reportero - Noticias de Puebla (@RupiReportero_) November 7, 2024
La secretaria de @SSalud_mx Federal acaba de clausurar la oficinas de la #FAKE psiquiatra Marilyn Cote en Torres Médicas 2. #Puebla @CharlatanesMed @Dios_0ficial pic.twitter.com/UomAIQXu2D
RESPUESTA DE MARILYN COTE A VIRALIDAD DEL CASO
Tras la oleada de críticas y cuestionamientos, Marilyn Cote emitió un mensaje en su página de Facebook el jueves 7 de noviembre a las 11:27 am, invitando a las personas a presentarse en sus instalaciones para cualquier aclaración. Su mensaje textual fue: “Te esperamos de manera personal, en nuestras instalaciones, si ud desea tiene alguna queja o aclaración estamos Como siempre a la orden para Uds pero de manera personal y seria”.
Sin embargo, la publicación no logró apaciguar los comentarios en su contra. Usuarios en redes sociales respondieron con más cuestionamientos, bromas y señalamientos sobre los riesgos que representa el ejercicio de prácticas de salud sin la debida capacitación. Las reacciones al mensaje se avivaron con críticas que recalcaron la importancia de no trivializar los tratamientos de salud mental y las consecuencias de emplear títulos falsos.
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Además, los comentarios en su perfil de Facebook están restringidos únicamente a personas que la han seguido durante más de 24 horas, lo cual también ha sido objeto de críticas y sospechas entre los usuarios, quienes ven esta medida como una forma de limitar la exposición pública de las opiniones negativas.
Se ha hecho un llamado urgente a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) para que lleve a cabo una investigación en su contra, con el fin de proteger los derechos de los pacientes y evitar que se ponga en riesgo a personas que buscan mejorar su salud.