Honduras y el expediente AMLO: EU pone lupa por su influencia en Centroamérica

Opinión
/ 8 diciembre 2025

La súbita visita a Palacio de la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, el martes 25, cinco días antes de elecciones críticas en su país, coincidió con reportes diplomáticos según los cuales la Casa Blanca de Donald Trump cuenta con evidencias –“irritantes”, se les calificó para este espacio– de que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador canalizó hasta 100 millones de dólares al régimen de la mandataria hondureña para que se granjeara apoyos políticos y actuara en contra de sus adversarios.

De acuerdo con estos reportes, desde inicios de 2022 -en coincidencia con el arranque en su cargo de la presidenta Castro-, la administración del exmandatario mexicano utilizó con sesgo ideológico un programa orientado a desalentar la migración dando empleo a jóvenes en sus países de origen en la región centroamericana, para lo que contó con el apoyo inicial de Washington, entonces bajo el demócrata Joe Biden, hasta que la parte estadounidense determinó que existían procedimientos inclinados a la corrupción.

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Los informes apuntan en el sentido de que López Obrador ordenó destinar hasta 400 millones de dólares –oficialmente se anunciaron 150– hacia gobiernos de Guatemala, Nicaragua, Cuba y el propio Honduras. El canal fue la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Amexcid), entonces a cargo de Laura Carrillo Cubillas, prima de Mario Delgado, actual secretario de Educación Pública. En septiembre de 2023 fue designada subsecretaria para América Latina y el Caribe, y justo dos años después, embajadora ante organismos de la ONU en Roma, entre ellos la FAO.

En el caso de Honduras, los fondos se canalizaron a través de nuestra embajada, encabezada por Susana Peón Sánchez, de origen cubano -cuyo cargo violaría la Ley del Servicio Exterior, que exige para ese puesto ser mexicano por nacimiento.

Fuentes diplomáticas hondureñas dijeron que Xiomara Castro habría anticipado a la presidenta Claudia Sheinbaum el inminente desastre electoral del oficialismo, que el domingo 29 llevó al tercer lugar, con menos del 20% de los votos, a su candidata, Rixi Moncada Godoy, protegida del dos veces presidente (20013-2017; 2017-2022), Manuel Zelaya, esposo de Castro Sarmiento.

La gobernante hondureña habría compartido igualmente a su anfitriona en Palacio que el más probable ganador de la que ha sido una muy accidentada contienda resultaría ser el político y empresario Nasry “Tito” Asfura Zablah, de 67 años y ascendencia palestina, postulado por el Partido Nacional, de corte conservador, abiertamente apoyado por el presidente Trump. Durante su campaña, Asfura viajó constantemente a Washington, donde habría entregado -y recibido- información de inteligencia, entre ésta los apoyos de López Obrador al gobierno de Honduras.

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El “Expediente AMLO” en la nueva crisis hondureña tendrá un carácter tóxico en los momentos en los que el gobierno Trump está modificando la “Estrategia Nacional de Seguridad” de Estados Unidos para atribuirse –como ha sido alegado durante dos siglos– el derecho a tener injerencia en América Latina para presumiblemente salvaguardar su seguridad nacional, bajo la luz de una agenda dominada por los temas de migración, tráfico de drogas y comercio. Esto último, para bloquear la creciente expansión de capitales y productos provenientes de China en el hemisferio.

Se multiplican los casos en los que la Casa Blanca está acompañando esta estrategia con el abierto impulso, en épocas electorales, de organismos y personajes bajo el espectro de las derechas, en ocasiones tomando ventaja de fracasos de operación de gobiernos de izquierdas, como ha ocurrido en Chile, Argentina, Bolivia y Perú, por citar los casos más claros. Expertos internacionales muestran certeza de que tal patrón mostrará avances en otras naciones. Pero prevén que encontrará serios obstáculos en las dos principales de la región: Brasil y México.

Roberto Rock Lechón, director del equipo que impulsa el proyecto de La Silla Rota. Escribe la columna política “Retrato Hereje” desde 2013. Ha sido periodista durante más de 40 años. Ocupó diversos puestos en el periódico “El Universal”, entre ellos reportero, editor y director editorial. Ha colaborado en varias publicaciones y es autor y coautor de diversos libros. Ha sido conferencista en diversos países en temas de periodismo, transparencia y libertad de expresión.

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