Reflexiones poselectorales 2024

Opinión
/ 3 junio 2024

Escribo estas reflexiones posteriores a las elecciones del día de ayer, en las cuales estuvieron en juego más de 19 mil cargos. Lo hago con información preliminar de las encuestas de salida y los avances del PREP, cuyos resultados finales saldrán entre las 11 y las 12 de la medianoche.

1. Los resultados para la Presidencia indican una derrota de Xóchitl Gálvez por una cantidad no menor de 10 puntos. Aun así, la fuerza de Xóchitl retuvo para la oposición los estados de Guanajuato, Querétaro y Yucatán, y podría haber ganado cuatro estados morenistas para la coalición: CDMX, Morelos, Puebla y Veracruz.

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2. De la misma manera, Morena no obtuvo la mayoría calificada en el Congreso, lo cual, a reserva de conocer el número exacto de curules para cada partido, le impedirá a Morena modificar la Constitución.

3. En el caso de Coahuila, dos de los municipios que forman parte de la columna vertebral de la gobernabilidad política y económica del estado, están en riesgo: Torreón y Piedras Negras. Aun así, el PRI y sus aliados recuperan Monclova y afirman, de manera contundente, su triunfo en Saltillo y con ciertas dificultades en Ramos Arizpe. Monclova, por su profunda crisis económica, es un lastre que reta −de manera importante− la gobernabilidad del estado. Y sin Torreón y Piedras Negras, aún más. Por otra parte, perder esas dos ciudades abre, desde el suroeste y el norte, la posible infiltración del crimen organizado, en primer lugar, y la creación de una plataforma morenista para tomar por asalto la gubernatura en 2029, en segundo lugar.

4. Los candidatos a las diputaciones federales priistas −con excepción de Jericó Abramo− tienen dificultades para despegar y rebasar a sus contrincantes morenistas. Lo mismo ocurre con los candidatos a la Senaduría: Miguel Riquelme y María Bárbara Cepeda.

5. De confirmarse estos resultados en las presidencias municipales y, en el peor de los casos, con algunos candidatos a las diputaciones federales y a la senaduría, se abriría por necesidad una seria reflexión al interior del priismo estatal: ¿Cómo explicar la derrota? ¿Fueron fallas de organización electoral o resultado de una división interna, de manera particular, en Torreón? ¿Está desgastada la estructura territorial y, por tanto, existe la necesidad de mejorarla? ¿Faltó vincular el trabajo territorial con el de las clases medias y altas? ¿Fue una decisión acertada no impulsar la candidatura de Xóchitl desde las candidaturas priistas en sus campañas y en el trabajo territorial?

Responder a estas preguntas, entre otras, es de crucial importancia, porque de ello depende fortalecer al tricolor ante un tsunami morenista que continuará creciendo de manera significativa en los 38 municipios del estado durante los próximos seis años.

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6. De ser el caso, este escenario inédito, en el cual el PRI pierde tres municipios importantes, tres o cuatro diputaciones federales y la senaduría, plantearía retos importantes al gobernador Manolo Jiménez y a su equipo, en relación con la gobernabilidad de Coahuila, la configuración de aparato de gobierno y con el PRI nacional.

El próximo miércoles, con datos duros comprobados, realizaré un análisis más detallado de los sucesos ocurridos en esta elección, considerada la más importante de la historia del país y que, sin duda, reconfigurará el mapa político de nuestro México.

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