Continúa la venta de comida chatarra en las escuelas de Saltillo pese a su prohibición
COMPARTIR
La venta de alimentos chatarra en el exterior de algunos planteles escolares de Saltillo no ha cesado; “chetos”, chicharrines, papitas, nachos preparados, dulces, refrescos y hasta nieve de sabores, es lo que los estudiantes del nivel básico consumen a la salida de la escuela.
Sin embargo, a decir de algunos padres de familia, la venta de “chatarra” ha disminuido en comparación con el último ciclo escolar previo a la pandemia, tanto en el interior de las escuelas, como en el exterior, los entornos escolares eran ‘obsogénicos’ ( que favorece el desarrollo de la obesidad), según dijo una madre de familia.
“Por todos lados te vendían el refresquito, las papitas. Ahorita la cooperativa (el estanquillo de la escuela) abre solo un ratito y les venden vasos de fruta y comida preparada como burritos, gorditas y taquitos”, explicó otra madre, en el exterior de la escuela Anexa.
Sin embargo, los menores continúan consumiendo jugos y bebidas azucaradas, entre otros alimentos que deberían prohibirse, basado en las disposiciones de la Ley para la Prevención, Atención y Combate del Sobrepeso y la Obesidad para el Estado.
VENTA DE CHATARRA ESTÁ REGULADA
Los lineamientos generales para el expendio y distribución de alimentos y bebidas preparados y procesados, es una ley que regula lo que se vende y expende en todas las escuelas públicas y privadas de México, desde preescolar hasta la universidad.
Entre los alimentos que no deben venderse en escuelas, se encuentran bebidas azucaradas como refrescos regulares y light, leche de sabor con azúcares añadidos, botanas saladas, galletas, pastelitos, dulces y postres, gomitas, papas fritas, etcétera.
TE PUEDE INTERESAR: Acudirán niños de Saltillo sin uniforme a clases por dos meses a falta de inventario
Por otro lado, los expendios o cafeterías escolares sí podrán ofrecer botellones de agua natural, o bebederos y garrafones gratuitos de libre demanda; cereales integrales de amaranto, avena, almendras; oleaginosas como pepitas, nueces, frutos secos, cacahuates, almendras; leguminosas secas como lentejas, habas y frutas.
La regulación federal actual permite que los viernes se vendan algunos productos ultra procesados que cumplan con determinados criterios nutrimentales.
¿POR QUÉ NO COMER “CHATARRA”?
De acuerdo con la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDMI), el consumo de comida chatarra puede causar trastornos como la desnutrición, obesidad, hiperactividad, gastritis y caries. Además, los menores se vuelven más propensos a desarrollar diabetes, cáncer, entre otros padecimientos graves.
REDMI también advierte que una alimentación basada en carbohidratos puede contribuir al desplazamiento de los alimentos naturales y sanos que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico.
Promueve daños severos al medio ambiente, debido a que generan basura y su producción requiere del suelo y de yacientes de agua potable, según apuntan datos de REDMI.
TE PUEDE INTERESAR: Atropellan a perrita en Saltillo y pierde patita; dueño pide apoyo para pagar operación
LA CASA, EL PRIMER FILTRO
La Secretaría de Educación de Coahuila indicó que, para evitar el consumo de este tipo de alimentos, es necesario que los padres de familia evadan las dietas alimenticias basadas en comida chatarra, además de promover hábitos de nutrición saludables entre sus hijos.
Advirtieron que en las escuelas de la Región Sureste de Coahuila se ofrecen alimentos saludables, que obedecen a los criterios que se establecen en los “lineamientos generales” para el expendio de procesados.
“La recomendación es que los padres de familia vigilen lo que sus hijos están consumiendo, y que también les ayuden a evitar el consumo de estos proporcionándoles un refrigerio preparado, adecuado a sus necesidades diarias”, comentaron voceros.
De acuerdo con un decreto para Promover y Fomentar el Consumo de Alimentos de Alta Calidad Nutricional en las Instituciones Educativas dependientes de la Administración Pública del Estado e incorporadas de nivel preescolar, primaria y secundaria’, la organización recordó que se considera indispensable proporcionar a niños, niñas y adolescentes una dieta sana y balanceada para que su potencial de desarrollo sea óptimo ya que los hábitos alimenticios se adquieren en los primeros años.
“Estos hábitos les permiten marcar una diferencia entre una vida saludable y el riesgo de desarrollar padecimientos crónicos”, subrayó REDMI.