El saltillense que descubrió un número matemático
Eutimio, además de erudito en las matemáticas, es un personaje al que se le recuerda por su bondad y rigor como docente
¿Qué tan bueno o buena te consideras para las matemáticas? Eutimio Alberto Cuéllar Goríbar era un “crack” en esta disciplina.
El saltillense nacido el 29 de marzo de 1906, destacó académicamente por crear el acertijo “pitagoritas” y descubrir un nuevo número matemático conocido como “Logaritmo Giro”.
Si bien este no es un texto que busque profundizar en tecnicismos complejos, explicaremos las bases de los logros de Eutimio como ideas generales.
Primero, los acertijos “pitagoritas” surgen del cumplimiento del Teorema de Pitágoras, que dicta: en todo triángulo se cumple que la suma de los cuadrados de las longitudes de sus catetos es igual al cuadrado de la longitud de su hipotenusa.
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En palabras más sencillas: si los lados del triángulo son a, b y c, se cumple que a2+b2=c2.
Segundo, Eutimio descubrió un nuevo número matemático al desarrollar una especificación de logaritmo: el exponente al que es necesario elevar una cantidad positiva, llamada base, para que posteriormente resulte un número determinado.
Además de ser matemático, Eutimio se desenvolvió en las áreas de la poesía, y naturalmente como educador en la especialidad de matemáticas. Pero, ¿cómo llegó hasta ese punto de su vida?
EL INICIO
Sus padres fueron Eutimio Cuéllar y Cuéllar y Concepción Goríbar Sánchez. Sus estudios primarios ocurrieron en la capital coahuilense, pero al iniciar la secundaria se mudó a Estados Unidos, donde cursó también bachillerato y la carrera.
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Eutimio se graduó de Ingeniería Mecánica en el Instituto Tecnológico de Massachusetts, donde tuvo la oportunidad de ser alumno de Nobert Wiener, famoso en el gremio por haber sido un matemático y filósofo estadounidense, pero sobre todo el fundador de la cibernética.
LA CONSOLIDACIÓN
Cuando Eutimio regresó a su ciudad natal, en 1939, se entregó a la docencia en el Ateneo Fuente y en distintos colegios de la ciudad. Se convirtió en maestro fundador de la Facultad de Ciencias Químicas y del Instituto Tecnológico de Saltillo.
En lo que a su vida personal concierne, se casó con Lucila Alicia Villarreal Cuéllar y tuvieron cinco hijos: Javier de Guadalupe, Eutimio de Jesús, María de Lourdes, María Eugenia de los Milagros y Lucila de la Asunción.
En su columna “Mirador”, el cronista de Saltillo, Armando Fuentes Aguirre “Catón”, describe a Eutimio como “un riguroso profesor de Matemáticas” detrás del cual “había un hombre que era toda bondad y todo dulcedumbre”.
Eutimio murió en Saltillo el 26 de septiembre del año 2004, a los 98 años. En esta ciudad se le sigue rindiendo homenaje con un par de escuelas que llevan su nombre.
Una de ellas se ubica en la colonia Nuevo Mirasierra. Se trata de un preescolar con matrícula de 187 alumnos, de los cuales 95 son mujeres y 92 hombres.
En tanto, la Secundaria Técnica #41 localizada en el bulevar Jesús Valdés Sánchez, en la colonia Oceanía, también se llama Eutimio Alberto Cuéllar Goríbar en su honor.
Además, en el vecino estado de Nuevo León, también hay una Escuela Primaria que lleva el nombre del matemático saltillense, localizada en San Nicolás de los Garza.
LAS MATEMÁTICAS EN SALTILLO
La Escuela de Matemáticas de la Universidad Autónoma de Coahuila (UAdeC) se creó en 1987, cuando Eutimio tenía 81 años de edad.
Trece años más tarde se abrió la Maestría en Matemática Educativa y la Escuela de Matemáticas cambió su nombre por la actual Facultad de Ciencias Físico Matemáticas .
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En el año de 2003, el año previo a la muerte de Eutimio, se aperturó la Licenciatura en Física, que actualmente es la Ingeniería Física.
*Con información de Arturo Berrueto, Museo Presidentes, Archivo Municipal de Saltillo, Universidad Autónoma de Coahuila.
