Saltillo y sus grandes virtuosos del piano; aquí una revisión y semblanza
En nuestra ciudad algo se puede decir sobre arte y música; desde el siglo 19 hay una fuerte cultura pianística, de la que forma parte el maestro Efraín Domínguez
Tocar un instrumento musical es digno de admiración por todos y todavía más cuando se trata de la de una magistral ejecución en piano. Esto porque por su capacidad polifónica, el piano es un instrumento de los más completos, su ejecución es bastante compleja; por lo menos para la mayoría de las personas.
Este instrumento revolucionó la historia de la música, fue inventado por Bartolomeo Cristofori en el año 1698, un fabricante de instrumentos musicales natural de la ciudad Padua, Italia, quien trabajó para la poderosa familia que dirigió por varias generaciones la ciudad Estado de Florencia, los Médici.
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Cristofori creó un trémolo martillado o clavicordio que evolucionó hasta convertirse en su icónico pianoforte de 1710, conocido hoy como el piano. El nombre de pianoforte hace referencia a la posibilidad que tenía el instrumento de producir sonidos fuertes (forte) o suaves (piano), ya que los instrumentos predecesores no tenían esa posibilidad de variar la intensidad del sonido.
Para ser pianista se requiere de ciertas habilidades que no muchos poseemos, como ejemplo: la armoniosa coordinación de movimientos de manos y pies de manera simultánea, concentración para dar la nota en el tiempo preciso, poseer una excelente memoria de un extenso repertorio de piezas.
El arte musical permite potenciar y adquirir otras cualidades como: el orden, disciplina, creatividad, buen humor, sensibilidad frente al entorno y en definitiva un pianista desarrolla un mayor grado de empatía.
Los pianistas son seres que prestan especial atención a los detalles, son hábiles, observadores y poseen un oído desarrollado, además son intuitivos, constantes y gustan de tomar retos con entusiasmo.
Para sacar el mayor provecho al piano, se requieren de siete habilidades importantes: Tocar acordes, contar ritmos, convertir escalas en música, dominar los patrones básicos de la mano izquierda, tocar con musicalidad, improvisación espontánea y usar notación apropiada.
EL PIANO EN SALTILLO
Es difícil saber cuándo y cómo llegó el piano a esta ciudad, lo más probable es que haya sido durante principios del siglo 19. Habrá que recordar que la ciudad contó con una tienda especializada en la venta de instrumentos musicales y partituras llamada Wagner & Levien, Sucs. Casa alemana que forjó el aprecio por la cultura musical en la ciudad a principios del siglo 20.
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La ciudad ha sido cuna de grandes ejecutores de este complejo y maravilloso instrumento. Echo mano a la imprescindible obra del profesor Arturo Berrueto, Diccionario Biográfico de Coahuila, de la cual extraigo valiosa información sobre algunos de pianistas.
MARGARITA PRINCE ROJO
Nació en Parras, Coahuila alrededor de 1865. Hija de Cosme Prince y María Elena Rojo, descendientes de irlandeses. Alumna del maestro Teodoro Cayuso. Fundó en Saltillo la primera academia de música llamada Santa Cecilia.
Entre sus alumnos destacaron Felipe Sánchez de la Fuente, Lorenzo Hernández, Eloísa Ruiz, Josefina y Carmen Harlan Laroche, Socorro Ramírez, Catalina Rodríguez y Fernando Gasper Landeros.
Promotora de presentaciones de ópera y zarzuela en Saltillo. Maestra de música en la Escuela Normal de Coahuila y en el asilo Enrique Maas, fue precursora de la enseñanza musical mediante colores a niños en edad preescolar. Falleció en 1965.
PRÁXEDES REYNA RUBIO
Nació en esta ciudad en 1867. Destacado pianista y pedagogo, muy joven inició sus estudios musicales en el Conservatorio Nacional de México, donde fue uno de los primeros discípulos de Carlos J. Meneses (1879-1890).
En 1891 regresó a Saltillo, abrió su propia academia de música y formó una orquesta de cámara. Invitado por Eduardo Gariel, fue profesor de canto en la Escuela Normal de Saltillo (1897). Sobre él mencionó Manuel M. Bermejo que “llegó a poseer una gran técnica, yéndose a radicar en su provincia [sic], donde hizo un brillante papel, ocupando el primer puesto entre todos los profesores y pianistas”. Fuente: 1930. Manuel M. BERMEJO: Carlos J. Menese
HERMANAS HARLAN LAROCHE
Carmen, pintora y pianista. Hija de Juan B. Harlan de origen inglés y Josefina Laroche González, hija del francés Eduardo Laroche. Familia de grandes talentos y una actitud solidaria con la comunidad.
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Carmen como pianista fue una connotada maestra. En su academia formó un buen número de concertistas, principalmente saltillenses. La academia se convirtió también en un centro cultural que recibió a los mejores músicos de la época como Luis Sandi, Cipriano Maldonado y Lauro D. Uranga.
Miembro del Seminario de Cultura Mexicana, participó activamente en la vida cultural de Saltillo, merecedora de innumerables distinciones y reconocimientos por sus méritos artísticos. En 1977 le fue otorgada la presea Saltillo y una calle de la capital del Estado lleva su nombre. Murió en Saltillo el 20 de enero de 1984.
Josefina, concertista y maestra de música, forjadora de varias generaciones de artistas coahuilenses, sobresaliente pianista y maestra, dedicó gran parte de su vida a la enseñanza del piano.
FLORENTINA AGUIRRE BELTRÁN
Nació en Saltillo en 1920. Hija de José Guadalupe Aguirre Macías y Fidencia Beltrán. Graduada en la ciudad de México como pianista, presidiendo el jurado calificador los maestros Manuel M. Ponce y Julián Carrillo. En Saltillo fundó la Academia Beethoven (1940), donde impartió clases hasta el año 2004. Por su incansable labor en la enseñanza de la música ha recibido diversos reconocimientos por parte del Gobierno del Estado de Coahuila.
SALVADOR NEIRA ZUGASTI
Vecino del Barreal Salado, rumbo oriente de la ciudad. Inició sus estudios musicales a los 13 años; ingresó al Conservatorio Nacional de Música en 1964 y en cuatro años realizó estudios programados para nueve.
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En 1967 obtuvo el primer lugar en el concurso nacional “Sala Chopin”, haciéndose acreedor a una beca por ocho años, en la Academia de Música de Viena, de donde se graduó con honores (1975). En 1970 se presentó como solista de la Orquesta Sinfónica Nacional en el Palacio de Bellas Artes de la Cd. de México, bajo la dirección del maestro Luis Herrera de la Fuente.
En Europa debutó como solista en 1972 con la Orquesta Sinfónica de Innsbruck. Desde 1971 realizó presentaciones regulares para la Corporación Austriaca de Radio. En 1986, en la Sala Dorada del Musikverein de Viena, interpretando como solista el primer concierto de Chaikovski.
Recibió en 1988 la presea Saltillo que otorga el ayuntamiento a los ciudadanos más destacados de la comunidad. En julio de 1984 realizó en Saltillo el estreno mundial de una composición inédita de Maurice Ravel. El maestro Zugasti ejecuta obras compuestas especialmente para él. Regularmente se presenta en conciertos y recitales en Europa, así como en México, Nueva York, Washington, Filadelfia, y en su tierra natal.
JESÚS MARTÍNEZ HERRERA
Originario de Saltillo, procede de una familia donde la música es una práctica común. Estudió en el Conservatorio de Las Rosas, en Morelia, Michoacán. Al regresar a Saltillo (1983), se hizo cargo de la Coral Universitaria de la UAdeC. Docente de la Escuela Superior de Música, donde asumió la dirección del Coro de Cámara. Única persona en Coahuila que tiene la carrera de director de coros, estudios que realizó en la Universidad de Jalapa, en las escuelas superiores de Música y Danza de Monterrey, y en la de Música de Zacatecas.
Autor del ensayo Iniciación a las Artes; trabaja en la creación de tablatura para la enseñanza de Sostenidos y Bemoles. Es también compositor de obras dirigidas al desarrollo temprano de las habilidades musicales.
DELFINA BARRERA CAVAZOS
Se forjó con las maestras Harlan Laroche, poseedora de gran talento musical, maestra de varias generaciones de aprendices y aspirantes a músicos, de recio carácter y duro semblante, a la hora de tocar se transformaba en armonía y dulzura.
EFRAÍN DOMÍNGUEZ VALDÉS
Nació en Saltillo el 24 de agosto de 1941. Hijo de Benjamín Domínguez Recio y Josefa Valdés. Estudió idiomas en la Escuela Normal Superior y piano en la Academia Santa Cecilia y en el INBA. En 1985 fue designado director del Teatro Fernando Soler. También ha sido jefe de Relaciones del Fondo Nacional de Asistencia Social, asesor del DIF (1981). Director de la Casa de la Cultura (1979), consejero de la reforma educativa en el área musical.
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Pertenece al Seminario de Cultura Mexicana (1967). Vicepresidente de la Alianza Francesa. Coordinador UAdeC en actividades artísticas y catedrático de la misma institución. Además es maestro del Instituto Tecnológico de Saltillo.
Recibió la medalla Leopoldo Villarreal Cárdenas por 30 años de servicio (1986). Fundador de la secundaria Gral. Andrés S. Viesca. Traductor al español de óperas. Acompañante de grandes artistas como Pedro Vargas y Agustín Lara.
Su larga trayectoria dentro de la cultura en nuestro estado y su aportación al mundo de la música, son razones suficientes para dedicar en breve un espacio especial, que daremos a conocer en breve, producto de una serie de entrevistas con este personaje y activo cultural.
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