Vecinos del sector aseguran que el arroyo es una fuente de infección porque su caudal lleva residuos del Rastro Municipal; el agua está llena de basura y en ella se pueden encontrar hasta colchones y sillones
El agua negra que invade la superficie no llega sola, pues invariablemente arrastra restos de animales, esto en el bulevar Francisco I. Madero. Lo sufren los vecinos y los comerciantes.
Además de los “aromas” que emanan de los arroyos, los vecinos de Parajes de Santa Elena deben soportar el olor a sangre y vísceras que despide el Rastro Municipal.